1. Fátima, la sobrina de mi mujer


    Fecha: 03/07/2019, Categorías: Incesto Autor: Richi67, Fuente: TodoRelatos

    Aunque Fátima era mi sobrina política, es decir, sobrina de mi mujer; catalogo el relato en Amor Filial, porque yo conocí a Fátima casi recién nacida, desde pequeña era muy pegada a mi mujer que era su madrina y a mi, que era su tío favorito. Siempre jugaba en mi casa que era más grande que la de sus padres, así como ir en nuestro coche, que siempre fue más bonito y más nuevo que el de su padre. La mimábamos mucho y ella nos quería mucho. Mi mujer y yo, no tuvimos hijos y todo el cariño lo dedicábamos en dárselo a nuestra sobrina. Ella tenía un hermano menor en cinco años y sus padres, desde que nació Alex, se volcaron en él, e hicieron que Fátima estuviese más con nosotros, así que era para mí más que una sobrina, casi una hija, la que no tuvimos.
    
    A sus veinte años Fátima tuvo un novio, Alberto; muy querido por todos, era un chico muy educado, menor en dos años de Fátima, y más niño tambien. Ella era más madura, más alta, de piel blanca, cabellos negros, ojos verdes, de cuerpo bien proporcionado, algo rellena con curvas que le daban un toque sexi; estuvieron casi cinco años, Ya todos pensaban en boda, el chico trabajaba en unos grandes almacenes y Fátima había terminado Biología y trabajaba en la misma Universidad en investigación; tenían todo para formar una familia. Pero algo que nunca supimos pasó y rompieron la relacion. Todos nos apenamos y especialmente nosotros le dimos todo nuestro apoyo. Ella lo pasó bastante mal unos meses.
    
    Por desgracia coincidente, en el mismo año de la ruptura de Fátima y Alberto; a mi mujer la detectaron una enfermedad grave. Mi mujer tenía 45 años y yo tenia 50. Fue un palo muy duro para toda la familia; en los años que duro su enfermedad, fue Fátima quien dedicó todo su tiempo libre en acompañar a su tía, nos turnábamos los fines de semana; pero todas las tardes al salir de trabajar, Fátima acudía a estar con mi mujer; yo hacía todo lo que podía; mi trabajo era muy estresante. Soy ingeniero de civil y trabajo en una empresa multinacional de la construcción, con mucha responsabilidad y muchos viajes, también un muy buen sueldo.
    
    La enfermedad de mi mujer no tuvo buena resolución, y a los dos años falleció. Aunque ya nos habíamos hecho a la idea, siempre la pérdida de un ser querido es una desgracia difícil de asumir; pero gracias a a la familia, los amigos y especialmente mi sobrina Fátima, me pude reponer sin caer en depresión. Fátima seguía viniendo a casa, se ocupó de arreglar y retirar todas cosas personales de mi mujer; además me convenció de cambiar el dormitorio, para que así de esa manera me sea menos penosa el dormir solo todas la noches, y al final me convencí yo de que había que cambiar toda la casa, así que le pedí a Fátima que me ayudase en la tarea; ella gustosa se ofreció y desde el principio ya me estaba dando ideas, tenía muy buen gusto.
    
    Poco a poco fuimos cambiando casi toda la casa; mi mujer siempre había sido renuente a meterse en obras o cambiar muebles, era muy ahorrativa, yo por ...
«1234»