Historias del tolita 6 - Relatos Eróticos

Historias del tolita 6

HISTORIAS DEL TOLITA 6

El sol brillaba en lo alto cuando salí del galpón de la carpintería de don Remo. El se había quedado durmiendo a pata ancha, después de la noche agitada que habíamos tenido. Me había echado como tres polvos en mi colita enrojecida, el me había echo acabar también tres veces y al fin se había quedado dormido y yo también dormí un buen rato.

Empecé a caminar despacio, tomándome mi tiempo, ya que no tenía ningún apuro. Me había duchado limpiando bien mi cuerpo un poco cansado pero satisfecho de haber gozado con un macho tan experimentado como don Remo, que en la cama era una fiera.

Perdido en mis pensamientos no me di cuenta y no escuche que un carro tirado por un hermoso caballo negro se coloco a mi lado.

__Buen día muchacho…__ saludo el gentil hombre con un sombrero de ala ancha y unos bigotes anchos y poblados, cejas igual de gruesas y mirada despierta, de ojos grises o al menos con la luz del sol daban esa impresión.

__Buen día señor…

__No anda nadie a esta hora en el pueblo…__ comentó sosegando al animal.

__Pareciera no…__ dije deteniéndome y mirándolo para ver sus intenciones aunque me di cuenta al instante de que estaban claras.

__Es un día hermoso…

__ Si sobretodo para pasear en carro…

__Ohh perdón, ¿quieres que te lleve?

__¿Sería tan amable?...hace tanto que no paseo en carro…

__Pero haberlo dicho antes, súbase muchachito, no pierda tiempo…__ vi que un hilo de baba se caía de entre sus labios. El aire de pronto se volvió cálido y pesado. Note sus ojos brillantes mirar mi cola apretadita con el short diminuto y pegado a mis nalgas regordetas y sabrosas.

El carro se puso en marcha lentamente y tomamos un camino solitario como saliendo del pueblo.

__¿Y adónde vamos?__ pregunté inocente

__Te llevo a mi estancia… ¿querías ir otro lado?

__No…no tengo problemas en conocer lugares nuevos…

__Me llamo Augusto pero todos me conocen como Gos, no sé, desde chico me dicen así…

__A mi me llaman Tolita…__ entramos por un camino de frondoso arboles. Un caserón se asomo de pronto a mis ojos. Gos detuvo el carro y bajo casi de un salto, era alto, un poco encorvado.

__Ven baja chiquillo, ven corazón__ me extendió su manota de manera cariñosa y como si yo fuese una dama. Baje lentamente y el no despegaba sus ojos de mis muslos que se mostraban fibrosos y bien torneados, apetitosos.

__Señor Gos__ una fuerte voz, enérgica me sobresalto a mis espaldas.

__Ignacio__ dijo el hombre maduro con un sudor fino brillando en su frente amplia.

__Señor__ dijo la voz y me miro con cierto desprecio.

__Ignacio, baja las cosas del carro, y tu Tolita ven conmigo, tenemos cosas que hacer__ y empezó a caminar para la puerta de la casona. Cuando entramos en la casa, me habló muy despacio casi rozando mi oído

__Es un celoso…no le gusta que traiga gente a la casa y menos jovencitos tan hermosos como tu Tolita…__ dijo acariciando mi pera y haciéndome dar escalofríos de putita ...