1. Sueños sexuales; El ladrón.


    Fecha: 10/06/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Sam, Fuente: TodoRelatos

    ... piedad me reprobarían.
    
    La luz de la cocina iluminaba un poco la habitación, podía ver al tipo, al rededor de 1.80 con unos kilos de más, playera y pantalón negro, además de un cubreboca y una gorra que impedían ver su rostro. Miraba a todos lados comprobando que lo que decía era cierto.
    
    X: Pues creo que sí puedes darme otra cosa. - dijo recorriendo su vista en mi cuerpo.
    
    Era más que obvio, en ese entonces solo llevaba un cachetero negro y una blusita blanca de tirantes, la cual era lo suficientemente delgada para que mis pezones se marcaran sin problema.
    
    De inmediato se abalanzó sobre mi, con una mano me tapó la boca y con la otra comenzó a manosear mis piernas, sentía su respiración en mi cara, mientras besaba parte de mi rostro. Intenté dar pelea, pero era inútil, ese tipo pesaba más de 90 kilos, suficientes para inmovilizarme, mis gritos se ahogaban mientras su mano mantenía cerrada mi boca.
    
    X: Más te vale no gritar, no volveré a decírtelo, perra.
    
    Esa voz, la forma en la que me lo dijo, su tono autoritario, la manera en la que me dió esa orden, me hizo recordar a las veces que tomaba una postura de sumisa con un novio que tuve, el sentirme dominada era algo que tanto me fascinaba con él, lo sentía, pero no podía ser cierto, no podía creerlo, o no quería...
    
    X: Abrelas, ahora. - dijo nuevamente con ese tono.
    
    Si, hay que aceptarlo, me gustó. Abrí ligeramente mis piernas, debo de admitirlo, no es correcto, pero si, la situación me calentaba a toda velocidad y ese tipo estaba a centímetros de comprobarlo.
    
    X: Vaya, vaya, vaya jajaaja.
    
    Me miraba a los ojos mientras me tenía sometida con una mano, mientras la otra se colaba en mi ropa interior para encontrarse con mi vagina húmeda, me mojaba esa situación y ese tipo lo sabía.
    
    X: ¿Qué? Esto es lo que quieres, no lo niegues, perrita.
    
    Sus dedos comenzaron a frotar mi entrepierna, apretaba los dedos de mis pies aguantandome, una parte de mi sabía que me gustaba, me encantaba sentir esos dedos frotandome, pero otra parte de mi estaba a la defensiva, no es correcto, pero después de todo es algo que no podía controlar, mi lado puta iba saliendo incluso más y más.
    
    X: Vamos, vamos, dime que te gusta, admitelo, Perrita.
    
    Sus dedos aún seguían frotando, pero en cuanto se colocaron en la entrada de mi vagina, el poco control de mi misma se fue a la mierda.
    
    Sam: Mmmmmmmmmmm. - emití un gemido ahogado cuando sus dedos me penetraron.
    
    X: Jajaja vaya qué te gusta, perrita.
    
    Cerré mis ojos fuertemente mientras sentía como sus dedos me penetraban en repetidas ocasiones, la mano que cubría mi boca se deslizó hacia mi cuello para sujetarme de ahí. Subió mi blusita para dejar mis pechos desnudos ante él.
    
    X: Vaya, que bien estás Perrita, ufff.
    
    Sus dedos seguían entrando y saliendo de mi vagina mientras su boca y lengua se encargaban de mis pechos. Sentía como jugaba con mis pezones mientras trataba de meter lo más que pudiera en su boca.
    
    Sam: Mmmm aaah mmmmm mmmm ...
«1234...»