1. El chat me ayudó con mi sobrina 2 (Reeditado)


    Fecha: 08/06/2019, Categorías: Incesto Autor: tauro47, Fuente: TodoRelatos

    ... para probar, aunque no me garantizaba nada pues sólo era aficionada. Lo interpreté como una oferta para continuar nuestros juegos pero no pasó de ahí. Ese día lo pasó de compras, para cuando empezara la universidad, ir acorde a las demás chicas.
    
    Al volver me preguntó si las chicas se arreglaba mucho para salir a lo que yo le contesté que según el momento si. Entonces me contó que se había comprado varias cosas pero quería mi opinión, para si no eran adecuadas, devolverlas. Me pareció coherente y le dije que sería lo más imparcial posible. Me hizo sentar en el sillón y empezó a abrir paquetes por todos lados, allí había media tienda. Al principio se escondió detrás de una puerta y se cambió de ropa, salió y pidió mi opinión. La verdad estaba preciosa, aún así me hice el indiferente y la califiqué con un “buuueno” que la animó a seguir cambiándose.
    
    Al tercer cambio ya no se escondió detrás de la puerta y se cambió rápidamente de espaldas a mí, y a la quinta, ya se cambiaba de frente y cerca de mí, alternaba la ropa de calle con la lencería y yo le indicaba como estaba mejor. Me alegró saber que usaba una talla 95 de sujetador y los llenaba muy bien.
    
    Entonces empecé a poner pegas y sugerí algunos cambios… “éste está bien, pero estaría mejor sin tirantes…” y se los bajaba. Este otro está ideal pero debía ser con la copa más baja y le plegaba para adentro la copa con lo que dejaba el pezón asomando. Éste otro no te sujeta mucho y apretaba las tetas para juntarlas. Éste te marca los pezones y se los pellizcaba para hacérselo notar. Con las braguitas igual: ésta es muy antigua, ésta te marca la costura, ésta tiene mucha sisa, hasta que una se le metía entre los labios de la vulva y se los cogí con la mano abierta y la subí metiendo el dedo entre ellos, ella no paraba de reír y al final escogió unos cuantos.
    
    Yo sentado cómodamente en el sillón la miraba con displicencia hasta que en uno de sus modelos más sexis se acercó a mí y me dijo…
    
    A la vez, sus ojos señalaban mi polla, que se desperezaba a lo largo de mi pierna. Yo me sentí pillado y acerqué los brazos y la atraje hacia mí y empecé con un juego forcejeando y riendo hasta que se sentó sobre mis piernas frente a mí y le dije todo serio…
    
    Ella se dejó escurrir por mis piernas y pegándose a mi cuerpo me abrazó y me besó en los labios. Fue un beso largo, ardiente y buscando mi lengua metía la suya hasta encontrarla y absorberla con gula. Me clavó sus tetas en mi pecho con el sujetador nuevo de tul negro, todavía con la etiqueta colgando, y yo por detrás, con una mano desabroché el cierre, con lo que cayó al suelo.Su sexo estaba pegado al mío y con movimientos oscilantes me provocaba lo que me hizo bajar los pantalones y dejar mi polla vertical entre ella y yo.
    
    Bea se apretó contra mí a la vez que mis manos se incrustaban en sus nalgas. Entonces se levantó un poco y haciendo a un lado la braguita cogió mi polla y la encaró certeramente en su vagina, dejándose caer de golpe mientras me ...
«1234...13»