Que estoy haciendo? - Relatos Eróticos

Que estoy haciendo?

... mis ojos.

Mi cara estaba a escasos centímetros de su cuerpo, y concretamente de una parte muy íntima de él. Desprendia un olor que no entiendo el porqué me atraía y recordaba algunas imágenes de los vídeos que anteriormente había contemplado, mi mano acarició suavemente por debajo de su pecho y supongo que el instintivamente se giro abriendo sus patas.

No deje de acariciar pues parecía gustarle y estaba quieto y con la otra despacio acaricie sus partes, esperando ver si como anteriormente había visto en el vídeo, si el sentía placer aparecería su miembro...

Así fue, y no tardó mucho en aparecer, empezó a hacer ruidos extraños, pero no se movía, saliendo de dentro de el aquel miembro duro como nunca había tenido en mis manos.

Sentí un calor en mi mano impresionante, y lo presione despacio sintiendo un especie de gemido ahogado. Movía su cuerpo cada vez más y aquello no paraba de crecer y de endurecerse, y entonces se puso en pie y mantuve mi mano y empezó a agitarse más y más.

Estaba usando mi mano y con los movimientos de su cintura cada vez más fuertes sentía como aquel dócil animal estaba disfrutando.

Yo me sentía muy extrañamente excitada de sentirlo jadear y con la rudeza que estaba penetrando mi mano, empecé a sentirme muy mojada, pero tenía miedo pues no sabía cuál sería su reacción, era muy muy brusco.

Su miembro palpitaba y en una de sus embestidas sentí lo que en el vídeo llaman la bola.

Mi mano estaba mojada y veía como de aquel enorme y diferente glande plano salía liquido preseminal, pues hilos colgaban de él, y me excitó tanto que sujetando con mi mano parte de sus patas para que no me pisará, puse mi cara debajo llevando a mi boca aquel rudo glande.

Ese momento fue cuando descubrí que el sabor que emanaba de allí me iba a volver loca.

Nunca he sentido ese placer, se que puede sonar extraño, incluso leyéndome a mi misma algo dentro de mi dice que es sucio y no está bien, pero no recuerdo haber vivido una excitación como aquella, que llegó a su máxima expresión poco después al sentir en mi boca la explosión que me hizo incluso atragantarme con la cantidad que aquel animal soltó en mi boca.

Me levanté y fui corriendo al lavabo, y la imagen que vi frente al espejo, antes de escupir todo aquello, fue impactante.

No podía creer lo que había hecho, una mamada al perro d

e mi hermano y cuñada...

Continuará

Gracias por leer mi relato pues para mí es una liberación poder contar algo así, y me gustaría que si alguien ha vivido algo similar, pueda escribirme por aquí. Perdonad si no es un gran escrito, no soy profesional escribiendo, solo cuento mi historia.

Un saludo!!