1. Con la tormenta afuera y la… adentro


    Fecha: 29/05/2019, Categorías: Infidelidad Autor: ElenaRmz, Fuente: CuentoRelatos

    ... Tal vez la naturaleza tabú del sexo furtivo en el asiento trasero mientras tu novio está en el frente lo intensificó. Pero tampoco había estado nunca con un hombre de ese tamaño.
    
    Abrí las piernas tanto como pude, no mucho, y miré hacia abajo. Vi su polla abriendo mi coño, mis labios enrojecidos por el estiramiento y la fricción, pero me estaba poniendo más húmedo por segundo.
    
    Íbamos por un pueblo pequeño y nos cruzamos con el semáforo en rojo. Esteban no debe haberlo visto porque patinamos hasta detenernos. El sonido de charcos de agua volando por la ventana, llenó el auto. Solté mi mano de la boca de Adán y la sostuve en su hombro.
    
    Esteban se volvió para mirarnos. Seguramente mis mejillas estaban rojas por la excitación sexual de mi cuerpo. Mi cabello caía y bloqueaba mis ojos. Una polla estaba dentro de mí. Estaba atrapado en el acto. Sin embargo, no se dio cuenta.
    
    E: "Lo siento”, “Es difícil ver a lo lejos".
    
    Y: "Está bien", con todo el aliento que pude reunir.
    
    La luz cambió y nos fuimos de nuevo. La ciudad era pequeña y ahora estaba detrás de nosotros. Hice memoria. No más semáforos que recordara.
    
    Deslicé una mano entre mis piernas y comencé a tocarme, agarrando a Adán, tocándome. Sus piernas y estómago empezaron a tener espasmos, y sentí el latido delator de él viniendo dentro de mí. Incluso más intenso de lo que suelo sentir, dada su circunferencia. Sentir esto me puso a mil y apreté mis caderas contra él, mi coño apretándolo hasta que las olas de placer me golpearon.
    
    Recuperamos el aliento y nos sentamos en un silencio atónito. Me levantó y empujó su polla hacia sus pantalones cortos. Era más suave y aún más suave. Estaba satisfecho.
    
    Yo por otro lado, aunque satisfecho, me sentí como un idiota. ¿Cómo hice eso? Engañé a mi novio.
    
    Tiré de la parte de abajo de mi bikini para cubrir mi dolorido coño mientras disfrutaba aun de las frescas olas de orgasmo. Justo a tiempo cuando llegamos al estacionamiento del hotel. Esteban se estaciono en la entrada donde había protección contra la lluvia, bajando del coche Adán y Yo.
    
    E: "Vuelvo enseguida", y luego se alejó para estacionar en coche.
    
    Mientras lo esperábamos en la entrada.
    
    Y: "Eso no volverá a suceder", seria.
    
    A: "Si eso es lo que quieres, Podría ser nuestro pequeño secreto", socarrón
    
    Y: "No. Sin secretos.", seca
    
    A: "Está bien. Lo que quieras. No sucedió." prudentemente
    
    Y: "Bien, No pude evitarlo. Estabas ahí y yo…". Apenada
    
    A: "No es necesario que me justifique nada".
    
    Y: "Lo sé. Hagamos que ese lindo recuerdo sea un sueño. Un lindo sueño en el que pensaré algunas veces",
    
    No estaba tan enojado ahora como lo había estado. La ira que sentí fue conmigo misma. Fui yo quien tiró de mi bikini para dejarlo entrar. No era su culpa que sus pantalones cortos no pudieran contenerlo.
    
    Esteban corrió y lo tomé del brazo. Adán entró detrás de nosotros.
    
    E: "Parece que estamos confinados en nuestras habitaciones por la tarde"
    
    Y: "Parece, Estoy ...