1. YO 28, EL CHICO DE LA CALLE…13 (31).


    Fecha: 29/05/2019, Categorías: Gays Autor: Pinkys, Fuente: SexoSinTabues30

    Cuando aún vivía en mi pequeña ciudad cercana a la capital, Santiago de Chile, era fanático de motos (afición que terminó en una colisión con un bus, del que salvé milagrosamente) y gustaba de salir a distintos sitios, independiente del mes del año, frio o calor.
    
    En una salida en pleno invierno, regreso de visitar unas amistades, a altas horas de la noche o ya madrugada. Pasé a un restaurante que siempre estaba abierto, a tomar un café y un sándwich. Al entrar al local me encontré en la puerta un chico de unos 12 o 13 años que me saludó con una amplia sonrisa.
    
    Hice mi pedido, y pregunté a la dueña que era quien atendía, si podía invitar al chico a comer algo, a lo que ella accedió.
    
    Le pregunté si quería tenía hambre a lo que asintió y aceptó encantado mi invitación, regalándome de nuevo su sonrisa. Pedimos sendos sándwiches con café y pregunté a la señora si siempre estaba ahí y me dijo que de vez en cuando aparecía. Le pregunté porque estaba ahí y me dijo que su padre había llegado borracho a casa y prefería estar en la calle y evitar su presencia. Me comentó venía de una ciudad vecina, que tenía otros dos hermanos y cosas triviales de su vida.
    
    Se sirvió su plato, y le pregunté si quería otro lo que aceptó de inmediato. Le observé con más detención, media un metro y medio aproximado, delgado, pelo negro liso, ojos con hermosas pestañas, una sonrisa que ya describí, radiante.
    
    Pagué el consumo y me despedí de la dueña del local y salí seguido del chico. Se acercó a la moto y le pregunté que haría el resto de la noche y respondió que nada, caminar hasta que amaneciera. Le comenté que había mucho frio, pero se encogió de hombros como respuesta.
    
    ¿Quieres ir a mi casa? Pregunte, y accedió de inmediato. Le pasé mi casco y enfilamos a casa, que estaba a pocos minutos. Entramos, encendí calefacción y me saqué algo de ropa de motorista. El chico se sentó en un sillón y le encendí la televisión.
    
    Le pregunté si alguna vez antes alguien le había invitado a la casa, lo que negó, le pregunté si no tenía temor de ir con un desconocido a su casa a esas horas, lo que también negó, mostrándome una inocencia inesperada en un chico de la calle.
    
    Considerando que ya era avanzada la noche y había que dormir, le señalé que debía bañarse dado que no olía adecuadamente. Le señalé la ducha y le pasé un pijama mío y una toalla para que se aseara, lo que hizo sin problemas. Una vez que salió del baño le invité al dormitorio de visitas donde me preocupé de abrigarle para dormir.
    
    Recién me había metido a mi cama cuando lo sentí que se acercó a mí y me pidió dormir conmigo. Entre sorprendido y agradado le abrí las sabanas para que se metiera, me abrazó inmediatamente, lo que respondí con suaves caricias en su pelo algo húmedo y suavemente por su espalda. Debo mencionar que hasta ese momento no tenía doble intención con el chico. Luego de ello nos dormimos abrazados.
    
    Al día siguiente no iría a la oficina, era feriado, por lo que desperté ya avanzada ...
«1234»