Exhibirme delante de dos nenas de 23 añitos - Relatos Eróticos

Exhibirme delante de dos nenas de 23 añitos

... comían con los ojos y me decían lo bueno que era y lo guapo que estaba día sí, día también.

Nuria me había exigido que grabase con la cámara lo que pasaba, y es lo que pensaba hacer.

Cuando llegamos allí hicimos unas pequeñas compras y las chicas tenían ganas de fiesta. Después de cenar les faltó tiempo para abalanzarse sobre la ginebra y calzarse dos cubatas.

Cuando consideré que iban lo suficientemente borrachas saqué el tema de dormir, y les solté la bomba sin tapujos.

Yo: a ver, chicas. Hay dos ventiladores para dormir porque, con el calor y la humedad, aquí dormir es muy jodido.

Ambas asentían y Alba decía que ella odiaba la humedad por eso, porque a los cinco minutos de estar en la cama estaba empapada.

Yo: Bueno, pues como yo duermo sin ropa, y no os quiero incomodar, dormiré en el sofá, que es un poco más incómodo.

Analicé atentamente sus reacciones. Cuando dije lo de sin ropa Alba abrió un poco más los ojos mientras bebía y Claudia me miró atentamente, esperando a que terminase de hablar.

Claudia: yo igual. En verano no puedo ponerme pijama porque lo paso mal.

Alba: pues yo sí que me pongo un tanga y una camiseta de tirantes…

Esperaba a que hiciesen mención a rotar camas para poder dormir cada día con una a la que ponerle el rabo en la cara.

Claudia abordó el tema, pero desde su miserable punto de vista.

Claudia: oye, Alba, podrías dormir tú en el sofá, ya que como vas a dormir vestida…

La cara de Alba fue un poema, tenía el gesto de “¡¿perdona?!”.

Alba: ¿Y eso qué tiene que ver?

Claudia intentó justificar lo estúpido de su idea, pero intercedí pronto para soltar la idea.

Yo: ¿y si nos turnamos? Hoy duerme uno aquí, y mañana otro.

Claudia: Sí, ¿pero quién?

Yo: A la vuelta lo hablamos de momento vamos a beber un poco antes de salir de fiesta.

Yo ya había elegido dormir en una de las camas con Claudia. Tenía muchas ganas de pasearle el rabo y ver su cara de salida con sus ojos clavados en él. La mera idea ya me ponía tontorrón...

Salimos de fiesta y la verdad que fue “divertido”. Claudia y Alba se peleaban por ver cuál era la que más “perreaba conmigo”.

Sabiendo la que se venía me había llevado calzoncillos muy anchos y pantalones finos. Al segundo baile la tenía bien dura y el gordo culo de Claudia se estaba llevando mis restregones.

Ya borracha perdida decía todo lo que pensaba sin tapujos.

Claudia: eeey, la tienes enorme, ¿sabes? Alex (su novio) la tiene como una cuarta parte menos y cuando me perrea no me la clava tanto, le llega hasta aquí.

Y me tocaba la polla a través del pantalón sin descaro, como si estuviera soltera.

Me alternaba canciones para refrotarme con ambas, y mientras se lo restregaba con Alba, uno de los camareros se lo refrotaba a base de bien a Claudia, a la que le tocaba el culo sin que la otra protestase. Menudo putón…

Alba no decía nada, se limitaba a disfrutar y cuando se giraba a mirarme el paquete se reía.

La invité a un par de ...