1. Nuestra amiga argentina con su vecinito


    Fecha: 17/05/2019, Categorías: Anal Autor: dantraloco, Fuente: CuentoRelatos

    ... seguimos besando y me empieza a sacar la blusa, el corpiño, y me empieza a besar a acariciar con su lengua mis tetitas, yo ya estaba toda mojada, solo quería disfrutar lo que me hacía, así estuvo un rato, hasta que me hace acostar, me saca el shortcito, la bombachita, y se entierra en mi conchita, y lo de siempre me la empieza a chupar, muy despacito, para dejarme bien caliente, mis piernas ya estaba en el aire, bien abiertas (siempre lo hago) para dejar mi conchita toda para el, y así siguió un rato hasta que me robo mi primer orgasmo, solo con sus dedos y su lengua en mi concha.
    
    Él se sube a la cama, me pongo arriba de él (es una de las posiciones que más me gustan), me clavo su pija, yo de cuclillas con mis manos sobre ese lomito hermoso que tiene, y me pongo saltar sobre es hermosa pija, él me decía: “te gusta que te coja así”, “siii, siii, cógeme así”, me acuerdo que le decía hasta que me hizo acabar ¡de nuevo! (el pendejo, se la bancaba y todavía no había acabado, quería solo hacerme acabar a mi).
    
    Me da vuelta, a ver: el solo me agarra y me hace poner en cuatro, y me la empieza a poner en la conchita de nuevo, y me la metía, me la sacaba, me la metía me la sacaba, yo re caliente de nuevo agarrándome de las sábanas hasta que a los gritos me saco mi tercer orgasmo y él también acabo y como un animal, jeje
    
    Nos quedamos en la cama hablando, acariciándonos un rato, hasta que se la empiezo a tocar, PENDEJO DE MIERDA, SE LE EMPEZÓ A PARAR ¡DE NUEVO!, y eso para mí es irresistible, me voy hacia su pija y se la empiezo a chupar, él me acomoda, y nos quedamos en un 69, ¡cómo me chupaba la conchita!, me metía la lengua, los dedos, me puso re caliente, tanto, que yo se la chupaba como podía, porque el placer que me daba era mucho.
    
    Estuvimos así un rato, hasta que con mis juguitos, me empieza a meter un dedo en la cola, ¡mientras me la seguía chupando! que placer, yo solo tenía su pija en la boca, no podía hacer nada más que gozar y dejarme sentir lo que me hacía, así un rato, hasta que me agarra, me da vuelta, yo me pongo arriba de él, pero el pendejo me la empieza a poner de a poco en la cola, muy de a poco despacito, así estuvimos también un rato hasta que se me dilata bien la cola entra toda esa pija hermosa, y empiezo a moverme, el a bombearme, mis gemidos, los suyos, otra vez me pregunta: “¿te gusta?” “siii, seguí pendejo seguí cogeme bien”, le decía yo (ah, me re calienta que me pregunten esas cosas mientras me cogen), seguimos un rato hasta que ¡acabamos los dos juntos!
    
    Yo estaba hecha, había acabado varias veces, nos quedamos en la cama, y la verdad que necesitábamos “un recreo” jaja, me pregunta si quería tomar un café y comer algo, le digo que si, me voy a vestir para bajar, y me dice, que no, que sus viejos hasta mañana no venían, así que me da una camisa del viejo y me la pongo.
    
    Me gusta estar así, en bolas y solo con una camisa que me queda enorme, el se pone su bóxer y vamos a la cocina.
    
    Bueno, nada, me prepara un ...