1. Una historia real parte 6


    Fecha: 08/05/2019, Categorías: Transexuales Autor: tonya, Fuente: TodoRelatos

    ... en la mesa del fondo junto a el extintor, me colgó y se dirigió a mi mesa, estaba de frente a mí y se me quedo viendo con incredulidad, y me dijo, acaso eres tú?, si le respondí, siéntate por favor. Ella en todo expresivo solo dijo: ¡No mames amiga, en verdad eres tú? ¿No lo puedo creer, no mames, en serio?, ¡si le dije, soy yo, que no me reconoces?, a lo que respondió! Que cabrona esta, no mames, esta bellísima.
    
    ¿Y platícame me decía, no traes espumas ni prótesis ni nada verdad?, claro que no le respondí. No chingues, pásame la receta cabrona. Pedimos otros tragos y empezamos a platicar sobre ella y de mí, me pregunto que, si utilizaba hormonas y que cuales eran, le conteste que hasta el momento no había utilizado ninguna y que tampoco me había hecho ninguna cirugía. Le dije que afortunadamente o desafortunadamente todo era natural por errores de la naturaleza. Me dijo que ella pensaba que debía de hormonizarme un poco para mejorar la voz y hacer más acentuada mi figura, y que yo no tenía problema porque yo no tenía órgano y mucho menos era funcional como hombre, le dije que por el momento no lo podía hacer por la doble vida que llevo para poder subsistir, que si me feminizaba como ella decía, que no le veía ningún caso porque que más femenina me podía poner, y que además si me presentaba a la escuela como mujer me correrían. Me sugirió una serie hormonas y medicamentos, lo cual era una locura, pero me dejo la duda en el aire.
    
    ¿Sabes que morra?, me dijo, la neta la última vez que nos vimos estuviste fenomenal, pero si quieres complacer a los hombres debes de pulir tu técnica para mamar y para coger, estas medio “pendejona” aun, claro está que esto se aprende con la práctica, me encanto haberte quitado la virginidad, la neta que eres bien putita. Hoy te voy a dar unas clases y una buena cogida, pero la verdad es que ando corta de “dinerito”, no sé si me pudieras apoyar con un poco de lana, si está bien, pero en realidad la que me debería de pagar eres tú por las agasajadas que te das conmigo.
    
    Reímos y nos fuimos de ahí, como a las 11 de la noche llegamos a un hotel de paso, la verdad es que no estaba tan mal, tenía hasta un sillón de esos para coger. Llegando me dijo, quítate la ropa putita, te voy a coger, pero antes me vas a dar la mamada de tu vida, pero te voy a decir que está bien y que está mal. Yo obedecí, me quite la ropa con la que me había esmerado tanto en mi arreglo, solo me deje las medias, la tanga y el ligero, me sentó en la cama y ella se puso frente a mí de pie, y me tomo bruscamente de los cabellos, froto mi cara sobre su pantalón y de inmediato sentí la reacción de su verga, estando ella de pie, se bajó el pantalón y me puso su verga ya muy erecta en mi cara, me la restregó por todo mi rostro, olía delicioso.
    
    Mira, como la vez pasada, pero ahora no te tardes tanto, mámame la verga, primero lamela toda con tu lengua, chupa la cabeza de mi verga y chúpame los huevos, metete uno a la boca y luego el otro, chúpame la ...