1. Los pies de mi vecinita: Parte 2


    Fecha: 14/07/2020, Categorías: Fetichismo Autor: Solounchicomexicano, Fuente: SexoSinTabues30

    ... besandolos en el proceso.
    
    Me encontraba en un estado de trance en ese momento, jamás creí que llegaría a besarle los pies a sarita, pero ahí estaba yo! Dándome gusto con ellos mientras masturbaba mi pene. Llego el momento en el que sentí que estaba a punto de llegar al clímax, al momento en el que todo hombre se siente en el paraíso, el extasis puro!.
    
    Fui jalando mi miembro más fuerte y rápido, incluso estaba haciendo ruidos de placer, señal de que una gran corrida se acercaba. Besaba sus dedos, su planta y su talón incluso sus tobillos, se los lamia también pero de una menera suave y con cuidado (podría estar vuelto loco pero aun conservaba algo de sentido común)… Sentí como empezaba e contraerse mi pene, momento en el que lo tome con firmeza y lo dirigí hacia el piso pues no quería causar ningún estrago (como hubiera querido acabar en los pies de Sara). Cerré los ojos y me atrevi a chuparle la puntita de sus dedos, el momento era placer! Placer puro! Me estaba corriendo masivamente, jamas crei que tanto semen pudiera salir de pene… Fue una corrida silenciosa y nadie se dio cuenta, ni siquiera Sara!.
    
    Después de eso volte a ver a Sara pues me parecía increíble el sueño tan pesado que tenía esa niña, acababa de manosearme mientras le besaba sus pies y ella ni en cuenta. No quería irme pues aun quería seguir haciéndolo, pero no me di cuenta que perdí la noción del tiempo y ya había pasado 1 hora, estuve una hora allí! Y en cualquier momento se iba a despertar mi padre para alistarse e irse al trabajo.
    
    Me levante rápido y me dirigí al baño para tomar papel y limpiar la gran mancha de semen que deje en el piso, momento en el que aproveche para dar un último beso con lamida a sus pies antes de irme a dormir. Me acosté en mi cama y una vez más contento y satisfecho me dispuse a dormir con una sonrisa en mi rostro.
    
    En este momento haré un salto de tiempo de dos meses, pues durante este periodo lo único que hice fue lo mismo. Sara se quedaba a dormir con mi hermana y yo aprovechaba para ir a darme gusto con sus pies mientras ella dormía, incluso una vez me llegue a masturbar tres veces.
    
    Pasados los dos meses Sara y yo teníamos una relación más cercana, lo cual me parecía asombroso pues eso significaba que ella seguía sin enterarse de nada. En dado momento me comencé a sentí raro, pues una sensación muy extraña me invadía desde hace ya unos días… ¿Quería arriesgarme y decirle a Sara que me gustaban sus pies? ¿Pero porque? Quizá era porque me sentía más seguro de decirlselo por la confianza que se había generado entre nosotros? Quizá me hacía mucha ilusión el que ella no le molestara eso y hasta podría dejar que le besara e hiciera lo que quiera a sus pies? O era porque me estaba volviendo completamente loco?… Preguntas como esas invadían mi cabeza todas las noches antes de irme a dormir.
    
    Un día lo decidí, tomé la decisión más arriesgada de mi vida, había decidido elegir el momento más adecuado para platicar con Sara y decirle que me ...