Mi primer lésbico - Relatos Eróticos

Mi primer lésbico

... dormida, no me sentía del todo despierta, pero recuerdo que su aroma y sabor encendió la pasión en mi, una vez me acomodo le lamia y besaba su axila, quizás fueron las hormonas, pero para mi era un deleite. Belén se paro abruptamente mi rostro y cuerpo cayeron violentamente contra el sofá, el golpe me medio despertó de mi borrachera, al girar mi cabeza estaba belén mirándome Con una mirada muy perversa, esa ves tenía un lindo vestido de color amarillo de una sola pieza, con algo de escote, y espalda abierta. Ella me miraba como si fuera el alimento de una feroz loba Hambrienta

Belén acercó su cara a la mía

Belén: no pensé que mi amiga Carolina era una zorra, devuélveme mi sabor

Me tomó el rostro con sus manos y metió su lengua dentro de mi boca, moviendola de arriba a abajo dentro, sentía su saliva transitar de su boca a la mía, debía tragarla para no ahogarme, cerré mis ojos de vergüenza, ella saca su lengua de mi boca de forma rápida dejando caer su saliva en mi rostro, me toma de las piernas y espalda, me lleva entre sus brazos a su dormitorio, me lanza de forma abrupta a su cama, cierra la puerta

Belén: Carolina, ahora vas a ver que le hago a las zorras como tu, se lo que quieres

Me agarro el vestido del pecho, me lo rasgo de un solo tirón, dejando mis tetas descubiertas, y lo jalo hasta quitármelo, dejándome solo con un calzón negro de encaje puesto, me quito hasta las zapatillas que tenia, me tomó de los pies y arrastro mi cuerpo hacia los pies de la cama, doblo mis piernas dejándome en una posición lista para ser penetrada, pero ella era mujer no tenia pene, no era lógico, me saco el calzón dejándome desnuda con las piernas abiertas, veo como se quita su ropa, quedando desnuda, saca algo negro desde su velador, puedo ver su gran culo con algo así como un arnés negro, que se esta sujetando, al girar, podía ver el enorme y grueso pene de goma negro, que colgaba de su cintura, sin aviso previo, me penetro, desperté del todo, del dolor, mi vagina ardía, y dolía, rogaba que parara que me dolía, pero con sus fuertes brazos me tenía prisionera, me dolía hasta el útero, caían mis lágrimas de dolor, que ella no la compadecian, por el contrario parecía más motivada a penetrarme, poco a poco el dolor se fue transformando en calentura pura, estaba siendo abusada por mi mejor amiga, mi vagina estaba húmeda, y muy dilatada, acomodándose al tremendo pene de goma, ella se dio cuenta que lo estaba disfrutando, al verme abrir más las piernas y no oponer resistencia, mientras me acariciaba las tetas, con mis ojos cerrados

Belén: Te gusta zorra, a todas las como tu les gusta esto, dime sucia puta si te gusta

Yo: Me gusta Belén, penetrame así rico, soy tu puta

Belen: cállate esclava, no me des órdenes, dime ama, perra sucia

Yo: ama soy suya, aaah, aaah!

Belén motivada por mi sumisa personalidad, aceleró la penetracion, con sus gruesas piernas atléticas podía sentir como escurría mi vagina por el gran tamaño de pene que me metía y ...