Dos amigos Heteros - Capítulo 2 - Relatos Eróticos

Dos amigos Heteros - Capítulo 2

... bajar de la escalera.

- Yo: Vaya, pareces que vienes con ganas.

- Iván: Si ¿Verdad?, No se tío, pero me he puesto a pensar y me gustaría que esto no se perdiera. Quiero decir, no es que me esté enamorando ni nada de eso, pero en la ducha, he estado pensando en que esto de que nos “aliviemos” cada vez que queramos, y que tengamos esta confianza y la tranquilidad de que, aunque a ti no te apetezca chupármela, te la chupe yo y al contrario… Que cuando sea, me apetezca que me la chupen y me la chupes… Pues mola bastante.

- Yo: Hombre, para eso somos colegas de hace un montón de años. No es que sea algo habitual entre amigos, pero no sé, hoy por ti mañana por mí. Aunque más bien va a ser, “ahora por mí, dentro de un rato por ti” Jajajaja. Y deja de hablar así que me vas a ablandar y te la voy a tener que mamar para compensar esas palabras Jejejeje.

- Iván: ¿Sabes una cosa curiosa?

- Yo: Dime, aunque se muchas cosas curiosas Jejejeje.

- Iván: Pues que ahora, si me haces la rima del 7 (“Agárramela y vete”) pues te la voy a agarrar de verdad Jajajaja.

- Yo: Es verdad ¡¡¡ Jajajaja. Oye una cosa, cuando me corra la próxima vez… Me habré corrido 3 veces en un solo día y tu llevas dos por ahora. Eso suman…

- Iván: Cinco.

- Yo: Pues por el culo te la hinco ¡¡¡. Así que ya sabes Jajajaja.

- Iván: Que hijo de puta ¡¡¡ me la has colado ¡¡¡. Si es que soy muy tonto para eso de las rimas. Y mira que se me había ocurrido a mi lo de los números.

- Yo: Si que eres muy tontaco. Pero vamos que te la voy a hincar por el culo es verdad también Jajajaja. Y oye, tenía condones que aún no han caducado, por poco, pero están en fecha y otra cosa, como bien has dicho, a tu ritmo. Si en algún momento quieres que pare pues me lo dices y ya está, sin problemas, no pienses que me voy a mosquear ni nada. Que, aunque tengo ganas de meterla por un culo, también me valen las mamadas, y más las mamadas que me das Jejejeje.

- Iván: Si, sí. Es más, tu apunta tu polla para mi culo y yo voy metiéndomela a mi ritmo. Ten paciencia.

Mientras me estaba diciendo esto último, se puso a cuatro patas en el sofá. Su culo no era el culo más atractivo del mundo, ni mucho menos, pero yo me iba a centrar en la sensación de meterla en un culito que, sin duda, iba a estar apretadito, ya que es un culo virgen (Virgen si no contamos el, o los objetos que se haya metido. De pollas, era virgen). Pero al verlo, se me quitaron un poco las ganas de lamérselo. Una cosa es que pueda chupar una polla y otra es comerme un culo peludo…

- Yo: Bueno, te lo voy a lubricar un poco. Les escupí en dirección a su culo y lo restregué un poco por su ano haciendo círculos con el dedo gordo.

- Iván: Joder, que bien se siente eso. Ten cuidado, que un rato mas así, y seguro que me corro.

- Yo: Pues no te corras que a ver si me vas a manchar el sofá, que estas apuntando directamente hacia él. Así que venga, ¿Estas preparado? El culo ya lo tienes un poco lubricado. Si vemos que no ...