Pau y las prácticas en la Masía. Capítulo 15 - Relatos Eróticos

Pau y las prácticas en la Masía. Capítulo 15

... Ese punto que me daba el valor para hacerlo. Y así fue como lo hice.

Ahí estábamos los tres. En ese mismo sofá, en que hacía unas semanas, Manel y yo nos habíamos corrido sobre Jordi. Igual que aquella vez, en camiseta, con unos simples bóxers y apurando la primera copa que nos había servido Jordi.

Y si, soy de ese tipo de personas, que cree que esas confesiones, es mejor contarlas sin adornos, sin dar vueltas, sin explicaciones innecesarias. Aproveché, un momento de silencio, en el que Jordi y Manel bebían.

Y la reacción no pudo ser otra. Eso es lo bueno de tener dos amigos como los que tenía yo. Que dices? En serio?…Esa fue su primera reacción. No juzgaron, ni preguntaron por mi sexualidad. Jordi y Manel sólo se alegraban por mi relación. Preguntaron por Clara. Les dije que lo habíamos dejado. Sí, les dije que por unos días compaginé las dos relaciones. Manel reía. Con los 20 años que teníamos Jordi y yo, y los 18 de Manel, ninguno habíamos tenido ningún tipo de relación seria. Seguro que los dos pensaban que era otra relación loca, en la que alguna que otra vez me había metido, pero esto era distinto.

Seguíamos bebiendo nuestra copa, mientras yo esperaba la pregunta. Fue Jordi quien la hizo.

Esa era la segunda parte, que tenía claro como contarla. No iba a entrar en el juego de decir, que era alguien conocido, que no podía decir quien era o contar una historia a medias. No iba a contar todos los detalles que me habían ocurrido las últimas semanas. No quería contar que Gerard me la había comido en el baño, que Marquez era una amante muy apasionado o que detrás de esa cara de timidez, Pedri era igual de morboso que cualquier chaval de nuestra edad.

Luego me dijeron que se me veía muy feliz, se me escapaba una sonrisa cada vez que hablaba de Eric. Y si, les conté que nos habíamos conocido, que no sabía porque, me había enganchado de Eric. Que había sido la primera vez que me había pasado eso, el enamorarme de un tío. Que llevábamos varias semanas viéndonos casi todos los días. Que era muy buena persona, y que le había hablado de ellos. No podía decir nada negativo, de lo que estaba viviendo. Le enseñé alguna foto que nos habíamos sacado en Ibiza. No se cuanto tiempo estuve hablando, pero los dos me miraban sin saber lo que decir.

Al final no me quedo más opción que escribirle. Calculé el cambio horario, y supuse que en ese momento Eric, estaba a punto de dormir. Me contestó rápido por WhatsApp. Sentía las miradas de Jordi y Manel, esperando la respuesta. Se me escapó una sonrisa, cuando leí la contestación de Eric.

Esa noche, quizás por la confesión que acababa de hacer, fue de las pocas en las que no nos pajeamos. Después de acabar la copa, los tres nos fuimos a la cama. Los tres en el cuarto de Jordi.

Ese sábado, como ya había imaginado, fue principalmente para recuperarme de la fiesta del día anterior. No hice nada. Hubiera sido un día perfecto para pasarlo en casa de Eric, pero volvía por la noche. Ese día no le ...