1. Nataly y el haitiano (Parte 1)


    Fecha: 11/09/2024, Categorías: Sexo Interracial Autor: OmarCM, Fuente: CuentoRelatos

    ... estado flácido juro que media al menos unos 17 cm, sin circuncisión, lo cual lo hacía más excitante para mí, con unos testículos bastante grandes.
    
    - Wow… - dije con sorpresa
    
    - ¿Es lo que esperabas? - díjo alardeando
    
    - Claro que sí - dije sin quitar la mirada de aquel pedazo de morcilla
    
    - Entonces, ¿Que esperas? Mi pene no se va a lamer solo
    
    Era como aquellas películas porno, solo que en este caso yo era la actriz, así que sin dudarlo me metí aquel pedazo de carne en la boca.
    
    Era bastante grueso y conforme fui mamandolo fue haciéndose cada vez más grande, cuando finalmente alcanzó su tamaño máximo sentí algo de miedo, puesto que era más grande de lo que yo creí que sería.
    
    - ¿Cuánto mide? - pregunté
    
    - 27 centímetros, nena. 27 cm de puro placer
    
    Su pene estaba duro como pata de perro envenenado, su glande era de un color violáceo lo cual me excitaba por alguna razón, así que seguí mamandolo, atragantandome con aquel pedazo de carne.
    
    Me lo metía lo más profundo que podía, el empujaba mi cabeza intentando llegar a lo más profundo de mi garganta. Sus gemidos me hacían ver qué lo estaba haciendo bien y que el lo disfrutaba, así que seguí hasta que el me pidió parar.
    
    - La chupas como toda una profesional mi amor
    
    - ¿Te gusta?
    
    - Me encanta, aunque… me gustaría más ver qué tan profunda eres
    
    Me detuve, me puse de pie y el me beso de nuevo. He oído que hay hombres a los cuales les da asco que los besen después de que su pareja les ha hecho sexo oral, pero a Omar no parecía importarle. El me llevo a su cama, me tumbó y ansioso abrió mis piernas, me quito el resto de mi traje de baño y vio mi vagina.
    
    - Rosadita… que rico - expresó mientras la olía
    
    - ¿Te gusta lo que ves? - le dije
    
    - Me encanta -
    
    - Bueno, en ese caso… ¿Que esperas semental? Mi vagina no se va a lamer sola - le dije pícaramente
    
    El comenzó a hacerme sexo oral, y si que sabía lo que hacía, me hacía retorcerme y gemir como loca, chupaba mi clítoris y lo lamía, lo hacía tan bien que me hizo correrme. Me había masturbado varias veces imaginando esto, pero jamás había llegado a un orgasmo tan potente como el que el me hizo sentir, podía oír como el se tragaba mis jugos y finalmente termino jadeando como perro que había caminado kilómetros.
    
    El abrió mis piernas y puso su pene en mi vagina, jugaba con el y me torturaba al hacer la intención de meterlo.
    
    - Mételo mi amor, hazme tuya - dije desesperada
    
    - ¿Quieres que te haga mía?
    
    - Si… por favor, quiero sentirte dentro
    
    - Si eso es lo que quieres… - dijo al mismo tiempo que empezaba a penetrarme
    
    Los dos jadeabamos y nos besábamos, aunque solamente teníamos un día de conocernos yo sentía como si nos hubiéramos conocido toda la vida.
    
    El empezó a bombear más fuerte y la penetración comenzo a ser más profunda, tan profunda que su glande tocó mi cuello uterino.
    
    - ¡Ouch! - exclamé con algo de dolor
    
    - ¿Ese es tu cervix bebé?
    
    Por lo que dijo, supuse que no era la primera vez que ...