La vida 7 - Relatos Eróticos

La vida 7

... acepte eso?

- Tengo mis métodos ocultos

- Entre las piernas jajaja

- Bueno bueno – intervine yo – desayuna rápido y anda a laburar

- Ohhh qué onda con vos? A ella también la vas a mantener alejada de nosotros?

- Es por su bien

- Vamos a ir todos los domingos a casa de tus padres

- En serio? – me pregunto Sabrina

- En serio? – le pregunte yo a Sofía

- Si nene, no podes ser así de desapegado a tu familia

- Bueno, no me voy a morir por ir los domingos – dije

- Nunca creí que llegara el día en el que vería a mi hermano así de complaciente – dijo abrazando a Sofía – gracias no sabes lo feliz que vas a hacer a mis viejos

- Bueno tampoco es que yo los niego a donde vaya. Los veo de vez en cuando además los viejos andan siempre de viaje

- No es lo mismo hermanito, ahora va a ser mejor. Eso sí, apenas te descuides van a estar hablando de nietos los viejos jaja

- Dáselos vos, qué problema hay?

- Yo sé bien que los viejos quieren que sea tuyo el primer nieto

- Bueno a ahora vas a empezar con tus complejos. Ya conseguiste visitas los domingo y además incomodarla hablando de hijos, ahora anda a laburar deja de joder

- Ahora sabés porque nadie lo visita Jajaja – le dijo a Sofía

- Jaja. Quiero más visitas tuyas – le dijo Sofía

- Obvio que sí. todos me aman

- Es increíble el parecido que tienen entre ustedes

- Viste hermanito todos se dan cuenta de la cara de mujer que tenés jajaja – me dijo mi hermana

- Iguales – dijo Sofía

- Preguntale cuanto es 2+2 y vas a ver la diferencia – dije

- Bueno. En estos días vamos a venir a comer con Ezequiel

- Quien? – pregunte haciéndome el que no sabía a quién hacía mención ese nombre

- Mi novio – dijo mi hermana

- Ahhh Ricky Fort

- Ja, ja – rio irónica

Todos nos despedimos y nos fuimos a trabajar yo pase a buscar a Evelyn y juntos nos encontramos a Maira, con ella pasamos por la quiniela a hacer nuestra apuesta y seguimos hasta el trabajo porque íbamos algo atrasados así que no pasamos por el bar. En el trabajo todo tranquilo, yo comencé a observar más a Maira. Estaba bastante seguro que no era lesbiana, pero la duda empezó a hacer mella en mi convencimiento cuando note ciertas actitudes de Maira, como su forma de sentarse que a veces era poco femenina, no se producía demasiado, sus uñas eran naturales y bien cortas, su ropa si era femenina pero ya no estaba tan seguro, además más de una vez note como comía con la mirada a algunas clientas. Mi cabeza divagaba por todas las posibilidades.

Cuando el día terminó yo estaba igual de confuso que a la mañana pero nada de eso importaba, había llegado la noche, yo disfrutaría de una gran cena con Sofía. era un poco tarde cuando llegue porque había estado haciendo un arreglo en un departamento del 2do piso

Solo llegar a casa y ver a Sofía, vaticinaba lo buena que sería la noche. Ella estaba a mitad de su producción, estaba sentada frente al espejo maquillándose, solo llevaba puesto un muy ...