1. Mí secreto que mí madre nunca lo pude saber, ni nadie 13


    Fecha: 09/09/2024, Categorías: Gays Autor: Extasis, Fuente: SexoSinTabues30

    ... exquisita verga de nuestro instructor que una vez más se comvertia en nuestro marido y macho alfa, él que con tan salvaje verga gruesa venosa y roja nos hacía las putas mas putas de la tierra. Ahí fue una vez más que todos nuestros gritos y gemidos se hacían uno solo, sincronizando nuestros movimientos y terminamos en un interminable haaaaaaa ummmm haaaaaaa rico orgasmo que nos hizo delirar de extremo he inexplicable placer y lujuria. Ya todo consumado, nos tendimos Carlitos y yo uno a cada costado en los brazos de nuestro hombre, y nos acurrucamos en señal de sumisión y esclavitud, donde quedamos exhaustos y felices de tan rico sexo salvaje, reposamos un rato bien abrazados y con besos intensos y apasionados y al ver la hora, nos dimos cuenta que no podíamos follar mas, porque ya era hora que llegarían el resto de jugadores, para irnos al estadio a jugar nuestro último encuentro. Nos fuimos a las duchas donde nos bañamos los tres juntos donde por última vez follamos nuevamente, en un exquisito trensito tan pero tan rico que gozamos hasta casi desfaller. Yo por mi parte no escurri el semen que tenía en mis profundidades de mi instructor, porque era mí cabala de la suerte para el juego, después nos vestimos para ir a esperar a los demás ., y así con una sonrisa de oreja a oreja Carlitos, yo y nuestro instructor radiavamos de felicidad por lo sucedido, yo pensaba que era una hermosa despedida a Carlitos, y no le dijimos a nuestro hombre que Carlitos se iba a otra ciudad a vivir con su familia. Jugamos nuestro último encuentro y con dos goles míos, a cero de ellos ganamos y campeonamos y recibimos nuestras medallas y el trofeo para el colegio. Era una enorme alegría para mí, porque jugar al fútbol me hacía feliz y todos los que fueron a ver el partido, incluido mi familia, nos ovaciónaron, y cuando estábamos con mi familia y Carlitos en el gramado del estadio tomándonos fotos para el recuerdo, vino nuestro instructor como si nada pasaba entre nosotros, y nuevamente pidió permiso a mi madre para que yo fuera a selebrar con el resto del equipo a su casa, donde nos iba hacer un almuerzo de gratitud y camaderia. Mí madre ajena a todo nuestros pecados, dijo que sí me daba permiso pero que esta vez iría acompañado de mi primita Naty. Cuando el instructor vio a mí primita, no pudo disimular su atracción por su delicado y bien contorneado cuerpito, ho yo solo lo aprecié, pero en verdad no me gusto la idea de mi madre, una porque no quería que mi instructor quiera tenerla o acosarla para sus bajos instintos y otra porque yo había pensado nuevamente invitar a Carlitos, pero ni pensarlo en ir los tres (mi prima, Carlitos y yo), porque no podría hacer nada de nuestros encuentros sexuales, ahora no sabía que hacer, pero como el almuerzo era dentro de dos días, no me preocupe, porque algo se me ocurría para solucionar ése inconveniente. Hasta acá les dejo este relato, para no hacerlo más largo, pero no se pierdan lo que pasaría en el siguiente relato, porque hay ...