Cartas de Susi a su prima Clara (5) - Relatos Eróticos

Cartas de Susi a su prima Clara (5)

... muy peligroso, que no me podía imaginar lo delicadas que eran esas partes en un chico y blablablá, pero noté cómo la otra sonreía disimuladamente. El caso es que dijeron que había que examinarle para ver cómo los tenía, y aunque nos dijeron que nos fuéramos, nadie hizo caso. El chico a pesar del dolor se resistió todo lo que pudo a que le bajasen en bañador, pero ellas dijeron que si no comprobaban los daños que podría ser peor y que se los podrían tener que amputar. ¡Tendrías que ver la cara de pánico que puso!

Así que le quitaron el bañador... y la verdad es que lo que vi me decepcionó un poco. Me daba mucha curiosidad saber cómo los tendría, me los imaginaba todo rojos o hinchados, pero apenas se le veía nada. Lo que más me llamó la atención fue verle el pito, que era muy, muy pequeño, estaba como encogido y casi parecía que no tenía. Aquello sí que me hizo mucha gracia y casi no pude aguantar la risa. Él me miraba a mí y a todas las chicas muy avergonzado, a mis amigas y también a la chica esa de su edad, que no perdía detalle y que, aunque se tapaba la boca, se le notaba la sonrisilla.

Pero el remate, que allí ya fue cuando no puede aguantar la risa, fue cuando una enfermera empezó a tocárselos. Él al principio aguantó, aunque se le caían los lagrimones, pero ya no pudo aguantar cuando le dijo iba a apretar con cuidado para comprobar no sequé… en cuanto lo hizo volvió a llorar, a gritar y a gemir y ya a todas mis amigas se les escapó una carcajada. La prima lo miraba con vergüenza ajena y no se atrevía ni a decir nada.

Al final acabaron llamando a una ambulancia para que se lo llevaran a hacerle pruebas y luego fue una movida porque mis padres se enteraron. A mi madre casi le da un ataque, pero Carol me defendió y dijo que había sido todo en defensa propia porque me había intentado ahogar en el mar, y me padre se enfadó muchísimo dijo que como es poli ya se iba a encargar él de meterle un buen puro por agresión y que como se lo encontrase le iba a cortar los huevos. ¡Yo con tal de librarme del castigo no dije nada, así que lo que le pase no es problema mío!

La verdad es que para mí esta experiencia ha sido de las mejores de mi vida. El hacer que a un chico se lo tengan que llevar con los huevos así en ambulancia… es más, un chico con tres años más que yo… ¡Me hace sentir que puedo ser capaz de cualquier cosa! Y también es para mí inexplicable cómo se puede hacer tanto daño a un chico con tan poco esfuerzo. Y bueno, en general fue muy divertida la situación con un montón de gente allí viéndolo… y también habrá sido lo más humillante que le habrá pasado a él en toda su vida, para colmo con tantas chicas por allí, incluyendo a su propia prima, y que fueran también mujeres las que le atendieron y le bajaron el bañador, ¡me imagino que eso tiene que ser lo peor de todo!

En fin, un abrazo, prima. ¡Ya hablaremos en otra ocasión!