Follada por el Dependiente del Motel Otra Vez - Relatos Eróticos

Follada por el Dependiente del Motel Otra Vez

No podía sacarme de la mente todas las veces que Felipe me hizo acabar sin siquiera tocarme mi verga, esa misma tarde luego de nuestro encuentro en el motel traté de masturbarme, pero ni un poquito de semen salió de mi miembro a pesar de estar muy excitada.

Estaba como loca recordaba sus manos tocándome, como hizo a un lado mi braga, su lengua en mi culo y por supuesto como me penetraba para hacerme acabar una y otra vez, necesitaba verlo de nuevo necesitaba sentirme su hembra y darle lo que quisiera, quería sentir su lengua en mi boca mientras su pija me rozaba por dentro y me hacía acabar como a una verdadera hembra, su hembra.

Hice lo que mejor se me ocurrió y di parte de enfermo en mi trabajo, tendría un día entero para dedicarlo a ser una hembra completa y exclusiva para Felipe.

Le mandé un mensaje de texto. Hola, te acuerdas de mi yo fui hace como 3 semanas atrás, quería saber si hoy tendrás alguna habitación disponible.

Al cabo de unos eternos 10 minutos- Si señor, si tenemos, le reservo una??.

Ah, claro resérvemela. Mmmmm No te acuerdas de mi Felipe???, me regalaste una soda?.

………….Liz? no había guardado tu número, pero claro putita como no me voy a acordar, así que vienes hoy, solita de nuevo? bueno ya sabes…. tendré los videos que te gustan y si quieres algo más me avisas.

UUUUffff siempre quiero algo más contigo, eres difícil de olvidar. Dime hay algún tipo de ropa que te guste para tus parejas???.

Mira, que eres coqueta Liz- me escribió- me encantan los tacones, los ligueros y me calientan mucho los dilatadores con joyas bien metiditos en el culo , el resto lo dejo a tu imaginación.

A si que a mi imaginación y vaya que mi imaginación es viciosa y sensual, obvio que me iba a dar rienda suelta a mi deseo de ser una mujer sexy, coqueta, caliente y complaciente. Mi mañana se fue en encontrar tacones que me quedarán y que por supuesto no me podía probar, amé las tiendas de descuento encontré unas sandalias con 7 cm de taco negras con pulsera al tobillo y tiritas con brillitos en los dedos, elegantes y muuuy sexies. Luego vino ir a una de mis tiendas de lencería favoritas donde compré un conjunto de corset con liguero incluido de tul y microfibra con puntitos plateados, las pantaletas a juego la parte de atrás de tul con los puntos y el frente de microfibra muy suave y un hilo del mismo conjunto con el frente de tul y amarritas por los costados y además de medias negras con liga. Luego seguí a una tienda por departamentos a comprar una falda tubo negra de secretaria, con un bello tajo en la pierna izquierda y una blusa tipo camisa de gasa color gris que le hacia un juego muy rico al corset. Finalmente terminé comprando maquillajes, una peluca de melena castaña , lubricantes y un dilatador anal metálico mediano con una joya color rojo.

No daba más de la exitación de saber que andaba con toda esa ropa para mi. En cuanto pude fui a un café, me metí al baño y me puse el plug, la tanguita muy ajustada y las ...