Mi Jefa Dominante 02 - Relatos Eróticos

Mi Jefa Dominante 02

... fue -- le sonrió burlonamente.

-- Eres todo un comediante Smith (sarcásticamente) En fin... Ya pudieron conocerse? -- cambió su rostro y sonrió.

-- Si, la Señorita Esmeralda parece ser muy competente y creo que les irá bien a las dos -- levantó su taza de té negro y le sonrió a la nueva asistente. El próximo lunes me entregarán su contrato Esmeralda. Yo me retiro que tú padre ya aterrizó y no viene muy contento.

-- Dime algo que no sepa! Dile que necesita follar por favor!

Smith se despidió con un beso en la mejilla de cada una de las mujeres, no sin antes decirle a Esmeralda de manera muy sonriente:

-- Prepárate Esmeralda que está niña es muy dominante y exigente!!

Mientras Karolina le hacía una mueca de desagrado a Smith, Esmeralda pensaba: "Ella puede hacer lo que quiera conmigo, yo feliz a sus pies". El abogado se retiró y la mujer de 43 años se dedicó a escuchar a la jovencita de 21 con mucha atención acerca de sus planes con las empresas que había heredado y las personas a las que debía presentar en breve, pero por más que trataba de poner atención a las palabras, Esme se perdía en los labios de Karo, en su mirada alegre y en sus ojos color miel tan claros pero penetrantes. Se sintió una adolescente enamorada. De nuevo se perdió totalmente y fue sacada de sí con una pregunta.

-- Te parece bien?

-- Disculpe Señorita, qué?

-- Esmeralda... No me digas así, es la última vez o te voy a castigar he! -- le dijo sonriente -- que si esta cifra te parece bien como honorarios mensuales.

-- Es demasiado Karolina -- respondió algo asustada al leer en una pequeña hoja de papel una cifra en dólares americanos -- Esto es el cuádruple de lo que gano en el banco... No lo merezco!

-- Primero: no trabajas para el banco ahora, trabajas para mí y eso te dará un status y tú salario debe de estar a la altura; y segundo: voy a hacer que te ganes cada centavo -- la miró a los ojos con una sonrisa coqueta y le guiño el ojo.

-- Comprendo, tu mandas aquí y no te negare que no está nada mal poder comprar algunas cosas que quiero y no podía costear -- Respondió sorprendida por el coqueteo y pensó inmediatamente en sus cámaras y su ordenador.

-- Así me gusta! Ahora dime: Si te pido venir a mi departamente fuera del horario laboral por alguna emergencia, lo harías o tratarias de resolverlo sin salir de tu casa?

-- Depende...

-- De qué depende? -- preguntó interesada Karolina.

-- Depende si me lo pides de la manera correcta -- Esmeralda estaba nerviosa pero decidió coquetear directamente con su nueva jefa y arriesgar.

-- Créeme que yo siempre solicito las cosas de la manera correcta -- le guiño el ojo coquetamente y sonrió ante el coqueteo.

Esme no esperaba tal gestó y volvió a bajar la mirada y se ruborizó como quinceañera. La mujer no entendía por qué se sentía atraída y nerviosa por prácticamente una niña, pero sentía la necesidad de complacerla, de cuidarla y de adorarla. "¿Me estoy enamorando de una niña de la mitad ...