1. Le follo la boca a mi hermana


    Fecha: 07/04/2024, Categorías: Incesto Autor: IncestLover, Fuente: SexoSinTabues30

    Soy un chico de 13 años, mi nombre es Juan. Amo a mi hermana y mi hermana me ama. Pero últimamente, cuando llegó la pubertad, sentí este afecto de una manera completamente diferente.
    
    Ella comenzó a excitarme sexualmente. Mi hermana tiene 17 años y se llama Agustina, de pelo rubio y ojos verdes, tiene tetas no tan grandes pero bien formadas. Va al gimnasio habitualmente por lo que tiene un culo bien parado y rico.
    
    Soy una persona muy introvertida a la que no le gusta socializar. Mi hermana comparte todos mis secretos, ella es mi audiencia para cada triunfo y debacle. Ella sabe que me siento incómodo con las chicas y, por lo tanto, trata de reemplazarme cuando y donde puede. Ella le da la máxima importancia a mi bienestar y no deja que nada me moleste.
    
    Últimamente lo único que me preocupaba era mi impulso sexual. He estado pasando todo mi tiempo viendo porno y revistas sucias. Empecé a darme cuenta de que mi hermana conocía este hábito y pero parecía que le daba igual, total es algo normal a esta edad. Pero no sabíamos que lo que pasaría ese día le daría problemas durante mucho tiempo.
    
    He tenido problemas con mis padres porque estoy desaprobando casi todos mis exámenes, solo me masturbo todo el día y no estudio para nada. Por lo que me castigan frecuentemente y nada parece motivarte.
    
    Era domingo por la tarde y afuera brillaba el sol. Mi padre estaba en un viaje de negocios y mi madre en lo de su amiga como siempre. Estaba destinado a estudiar para mis exámenes, pero en cambio me estaba masturbando con la pornografía.
    
    «¡Juan, baja! ¡¡El té está listo!!» Mi hermana me llamó, «¡Ya voy!» Respondí. Mi pene estaba hinchado y duro como una roca. Tenía dolor, quería aliviarme pero fallaba miserablemente.
    
    Seguí pensando en mi hermana. Las visiones de ella me ponían más caliente por segundos. Agarré un par de cojines y comencé a cojer con mi pene en el medio. Grité «¡Vete a la mierda Agustina! ¡Vete a la mierda! ¡Es tu culpa! ¿Por qué me haces esto?» Me enojó pensar que mi hermana era la responsable del dolor que sentía.
    
    Pensando en esto comencé a follar los cojines más rápido y con más fuerza y ​​comencé a golpear los cojines con uno de mis puños.
    
    Estaba ocupado en mi descontrol cuando escuché la voz de mi hermana llamándome lentamente: «¡Juan! Por favor, para. No puedo soportarlo más». Fui alcanzado por un rayo cuando rápidamente me recuperé y me apresuré a esconder mi pene con los cojines.
    
    Mi hermana estaba parada justo en frente de mí. Tenía un atisbo de miedo y conmoción en su rostro. Supongo que vio todo el programa que presenté, desde el principio.
    
    Se apresuró y se paró al lado de mi silla. Puso sus brazos alrededor de mí y me dio un fuerte abrazo. «¿Qué pasa hermanito? ¿Qué es lo que hice que te está molestando tanto que me odias?» Hizo una pausa mientras miraba los cojines en mi mano y luego continuó: «Sabes que puedes decirmelo»
    
    Toda la situación me tomó por sorpresa. Fue muy incómodo para mí retener algo ahora, ...
«1234...»