La secretaria de Mr. Parker (1/2) - Relatos Eróticos

La secretaria de Mr. Parker (1/2)

... muy especial y no lo usaba.

Varias veces al día, Molly era convocada a la oficina del Sr. Parker, él se abría los pantalones y le sacaba la polla... Ella se arrodillaba entre sus rodillas, abría mucho la boca y relajaba la garganta.

El Sr Parker descansaba la cabeza de su polla en su labio inferior y orinaba... Cuando terminaba, le quitaba las últimas gotas, limpiaba la punta con su lengua y volvía al trabajo... Rara vez se molestó en hablar con ella mientras meaba... Luego la despedía hasta la próxima vez.

Una vez, Molly tosió a la mitad y parte de la orina se derramó en los zapatos del Sr. Parker y en el suelo... Molly se disculpó mucho, segura de que iba a ser severamente castigada.

Pero la única reacción del Sr. Parker fue apretar los labios y pedirle que se llevara sus zapatos para limpiarlos y lamiera el desorden que había quedado en el suelo.

Molly limpió todo con gratitud, se ocupó de los zapatos y pensó que todo el episodio había terminado... No se hizo más mención durante el resto del día y Molly no pudo evitar pensar mientras caminaba a casa ese viernes por la noche: ¡Cuán amable era el Sr. Parker!

Pero, desafortunadamente para Molly, se había equivocado... En el momento en que entró por la puerta de su casa, su esposo se le acercó... Era un hombre extremadamente fuerte y en forma, que pasaba mucho tiempo en el gimnasio.

El esposo de Molly le informó sobre la llamada que había recibido del Sr. Parker con respecto a lo sucedido... Luego procedió a azotarle la lengua hasta que se hinchó al doble de su tamaño... Terminado esto, le dijo que durante el resto de la noche y el fin de semana, ella bebería toda su orina.

Con el fin de enseñarle control, mientras orinaba en su boca, su marido le mantenía la nariz cerrada y empujaba su polla tan profundamente en su garganta como podía.

El domingo por la noche había aprendido a controlar su respiración y su reflejo nauseoso... Cuando regresó al trabajo el lunes por la mañana, el Sr. Parker se detuvo un momento al pasar junto a su escritorio.

- "Confío en que no tendremos más problemas, Molly."

- “No Sr. Parker.”

- “Muy bien... Eso espero.”

Dicho esto, entró en su oficina y cerró la puerta... Unos minutos más tarde llamó a su escritorio... Cuando ella entró en su oficina y se arrodilló entre sus rodillas, él se estiró y le pellizcó la nariz para cerrarla mientras comenzaba a orinar.

- "Hablé con su esposo y me gusta bastante esto."

Se rió para sí mismo mientras terminaba de orinar.

Otro día, Molly sacudió la cabeza como si quisiera salir de la abstracción en la que se encontraba... Tenía algunas cosas que hacer antes de que el Sr. Parker llegase al despacho... Después de escuchar el contestador y anotar los teléfonos que habían llamado, encendió su ordenador y revisó su correo electrónico... Como de costumbre, había un mensaje del Sr. Parker.

Para:officecunt@Parkerfinancial.com

De:mrParker@Parkerfinancial.com

Asunto: Política de la nueva ...