Mi amo me prostituye 15 - Relatos Eróticos

Mi amo me prostituye 15

... enema. Aquel tratamiento me estaba haciendo daño pero no podía hablar apenas y lo único que hacía eran ruidos guturales.

Pude oírles decir que realmente parecía un animal mientras se reían.

Cuando se cansaron ambos, colocaron un tapón en el culo, lo que impedía que pudiera expulsar el líquido de mi interior, estaba dolorida e hinchada.

Tras aquello de nuevo el tipo de antes, con la manguera me quito todo el jabón, provocándome de nuevo daño y al acabar fijo que el animal ya estaba limpio por fuera.

Aprovechando el abrebocas uno de los hombres metió su rabo en mi boca para, aquella cosa era enorme, y comenzó a mear en mi esófago diciendo que el abrebocas era buena idea para usarme de retrete mientras alguien detrás mío comezo a azotarme con una fusta.

Fueron pasando todos y cada uno de ellos para mear e incluso alguno puso su culo para que sacara la lengua y lo limpiará cosa que hize como buenamente pude, los azotes en mi culo y espalda continuaron durante todo el rato.

Una vez pasaron todos por mi boca, mientras los azotes en mi culo continuaban se colocaron dos a cada lado y comenzaron a azotarme con unas zapatillas las tetas, yo a aquellas alturas estaba dolorida pero cachonda perdida.

Uno de ellos se debió dar cuenta porque dijo que el animal tenía ganas de rabo, que no era más que una zorra sin cerebro que para lo único que servía era como depósito de semen, a lo que todos se rieron de la ocurrencia.

Mientras dos seguian azotandome las tetas uno se.puso en mi boca y me la estuvo follando, yo lo único que podía hacer era dejarme hacer mientras otro de ellos me follaba el coño, estaba llena con no se cuantos litros en mis intestinos sin poder evacuar y dos rabos mientras estaba siendo azotadas las tetas que me dolían horrores.

Cuando sentí el primer chorro de semen en mi útero tuve un orgasmo bestial.

Fueron pasando todos por mis dos huecos libres corriendose un par de veces cada uno, siempre era azotada las tetas mientras estaba siendo usada.

Cuando acabaron y después de sacarme el tapón y evacúar aliviada comentaron que el animal ya estaba limpio por dentro y por fuera. Las tetas me dolían horrores pero había tenido una serie de orgasmos bestiales.

Tras recoger las cámaras se marcharon dejándome atada aún al potro y tras 5 mnt apareció mi amo, que tras desatarme y ayudarme a levantar, me dio la ropa y nos marchamos. Cuando llegue a casa era entrada la noche y a pesar del dolor de cuerpo que tenía estaba contenta y cachonda perdida.

Continuará...