Chantal camino de la exploración IV. Vamos al cine - Relatos Eróticos

Chantal camino de la exploración IV. Vamos al cine

Chantal camino de la exploración VI. Vamos al cine porno juntos

Los que me seguís sabéis que, con la perimenopausia, se me despertó un ansia de sexo que no conocía antes y que mi maridito, Daniel, no podía satisfacer debido a su impotencia para tener una erección o una duración suficiente para poder tener una respuesta satisfactoria. Además su pene había disminuido de forma considerable y permanecía flácido la mayoría del tiempo, por lo que me permitió tener sexo con otros hombres y le gusta estar presente convirtiéndose en un sumiso cornudo consentido que le gusta sentirse humillado. Nunca me lo hubiese podido imaginar, pero a veces todo es posible y las cosas pasan.

Estuve casi toda la semana pensando en algo morboso para hacer el fin de semana y por fin di con una gran idea. Sabéis que me gusta excitar a otros hombres y más delante de mi marido, vestirme muy sexi, un top con un buen escote que permita ver parte de mis bonitas y grandes pechos, falda corta ajustada para así mostrar mis largas, bonitas y bien torneadas piernas, y un culito prieto así unos buenos zapatos de taco medio….A veces sin ropa interior, otras con un mini tanga…Solo pensarlo me ponía húmeda. No siempre somos conscientes las mujeres de nuestro poder ni tampoco sabemos utilizarlo para nuestra propia satisfacción.

El exhibicionismo me gusta y excita enormemente. Me encanta saberme deseada así como estimular pasiones y ver a mi marido excitado al verme observada por otros hombres me produce una gran satisfacción y me empodera totalmente. Nunca me había preocupado demasiado despertar miradas, pero ahora no podía evitarlo. Siempre es agradable que los demás te deseen y ver el humillante comportamiento de mi sumiso maridito me excita aún más. Ver en sus miradas el deseo oculto o no tan oculto de desear follarme salvajemente, mientras el cornudo de mi marido se queda sentado contemplando la escena sin mediar palabra, sabiendo que sabe que sé que le excita tanto como a mí. Esta realmente hecho una maricona !!!

Le dije, esta noche iremos juntos a ver una película porno y te quiero con la mini jaula uretral puesta, pinzas eléctricas en tus pezones que yo ajustaré dependiendo del momento y con el plug anal hinchable y vibrador que también ajustaré según mi conveniencia. Yo sabía de su excitación que él intentaba ocultar. Tampoco sabía a estas alturas que él ya había estado con su ama en una situación similar, lo sabría más adelante, pero no es el momento de adelantar los acontecimientos, llegaran cuando toque

Le dije que se preparara que yo me iba a ducharme y arreglarme para esta actividad

No tardamos mucho en estar preparados. Quedó impactado ante la visión sexy de su mujer y salimos para dirigirnos a un sex-shop que sabía que tenía una pequeña sala de cine porno.

Para ocultar mi minivestido, cogí una gabardina que dejé entreabierta para poder mostrarme cuando quisiera, cuanto quisiera y ante quien quisiera.

Anochecía, cogimos un taxi que nos dejó a la ...