Mi pequeña dominante - Relatos Eróticos

Mi pequeña dominante

... auditorio.

Cuando empezaron a avanzar yo no perdía de vista a la alumna, me había impactado, cuando el bloque estaba pasando por donde estaba el personal de docentes le dije al director si me indicaba donde estaban los sanitarios, me percaté de que ella volteo a verme, y alcanzo a escuchar la plática, el director me dio las indicaciones y dijo que si gustaba me acompañaba alguien de las maestras, le dije que así estaba bien, cuando voltee a ver al bloque de los alumnos ella había desaparecido.

Me dirigí al baño por un pasillo, vi la indicación de que era de las niñas y abriendo la puerta entre al sanitario, estaba el lavabo, aproximadamente 6 mamparas cerradas con sus respectivos sanitarios, y al fondo estaba esa niña, con el pants abajo, masturbándose, gimiendo ahogando sus suspiros, pero de todos modos era de forma escandalosa, esa visión izo que se me humedeciera y provocara una especie de descarga en mi clítoris, le dije que tuviera cuidado, que era mejor que pusiera seguro, porque si una maestra entraba y la encontraba de esa manera la llevarían a la dirección, ella junto sus manos poniéndolas en forma de concha, y empezó a hacer movimientos de que estaba cogiendo, de repente me dijo “tú tienes la culpa pendeja, me excitan mucho las perras mujeres uniformadas”

Esa respuesta me puso a mil, cerré la puerta con seguro, enfrente de ella había una mampara con un sanitario, entre en él, bajándome el pantalón lo más posible me baje también mi panti, abriéndome lo más posible le dije “ven papi, aprovecha la oportunidad”, ella viendo mi concha rasurada abriéndose, entregándose a ella separo las manos de su entrepierna, se me fue encima, poniendo su concha con la mía, ambos sexos se pegaron como ventosas, sus dedos desesperados se aferraron a mis nalgas, me levante la playera, ella viendo mi bra lo bajo con rudeza y me empezó a mamar los pezones, mordiéndolos con hambre, mamando como si se estuviera muriendo de sed y buscara obtener leche de su hembra

Me daba embestidas fuertes, yo le decía “gózame puto, métela duro, folla a tu perra, desmadrame la concha” ella me daba embestidas más duras, hasta que se corrió, me dio todos sus fluidos, cuando lo hizo me mordió con más ganas sus uñas se clavaron en mis nalgas, cuando ella empezó a separarse la sostuve de las nalgas, le dije “me falta poco”, empecé a frotarme en ella, una de mis piernas se aferró a ella, hasta que me vine en su concha, cuando se separó su concha escurría fluidos, de ella y míos, se quitó su panti, se secó la concha y sin dar las gracias se salió del baño

Yo saque unas toallas desechables de mi bolsa, me limpie, vi mi pantalón de campaña y por suerte no se manchó de fluidos, me arregle y me peine, me fui a donde estaba el auditorio, estaba una maestra dando un discurso, después toco mi turno, di mis cátedras, los alumnos estuvieron interesados en el tema, después cuando eran casi las 12 del día termino la conferencia, saliendo del auditorio me despidió el personal docente ...