1. La Oficina V


    Fecha: 11/08/2019, Categorías: Dominación / BDSM Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... vecina asi tengo lo que necesite.
    
    Y se dio media vuelta para ir a su cocina a por la sal. Cuando volvió, se fijó más en Sonia y se dio cuenta de cómo iba. Una sonrisa se le dibujo en la boca
    
    - Vaya vecina, sí que vienes fresca. Si quieres pasa que hacemos algo para que este más caliente jeje
    
    - No puedo – dijo Sonia sabiendo que la conversación estaba siendo escuchada por Leyre y Mario, pero si quieres puedes venir un ratito a mi casa.
    
    - ¿No esta tu maridito hoy?
    
    - Si, pero no hay problema por eso.
    
    - Vaya, no sabía que erais tan liberales, jeje.
    
    Y diciendo esto cerro su puerta y pasándole una mano a Sonia por detrás, le agarro el culo. Al entrar en la casa, se quedó un poco cortado al ver tanta gente.
    
    - Tranquilo vecino, que somos de confianza – le dije. Yo soy Eduardo y estos son Mario y Leyre. A paula creo que ya la conoces.
    
    - Encantado – dijo aun algo retraído. Soy Juan.
    
    - Bien Juan – dije- Como ves, estos 2 son mis perros. Puedo hacer con ellos lo que quiera. Mario y Leyre son 2 empleados mios que los han ganado este fin de semana y a Leyre parece que se le ocurrió meterte a ti en el juego, siempre que estes interesado, claro.
    
    - Y como no lo voy a estar – dijo aun nervioso. ¿Pero con que les puedes hacer lo que quieras, a que te refieres?
    
    - Pruébalo tú mismo – dije
    
    Juan entonces fue hacia Sonia y le dijo que abriera la boca. Esta lo hizo y dejo caer un escupitajo en ella.
    
    - Trágatelo – le ordeno.
    
    Sonia lo hizo con gran cara de asco.
    
    - Mira la puta de la vecinita. Siempre tan altiva conmigo y ahora te tengo a mis pies como la perra que realmente eres.
    
    - Antes de usarla, tendrás que firmar un documento por el que te comprometes a no molestarles si no te son ofrecidos y a no revelar su vida real a nadie, ¿entendido?
    
    - Si, si, donde hay que firmar.
    
    Una vez hecho este trámite, los 4 miramos a Juan y le dijimos que ya era suya para lo que quisiera y que, si necesitaba ayuda para algo, se la pidiese a José. Él sonrió y mando a José que se acercase. Lo hizo como un perro y le dijo:
    
    - Ahora perro quiero que me la pongas tiesa para follarme a tu mujercita.
    
    Se bajo el boxer y enseño un miembro bastante ridículo. José empezó a chupar. No le hizo falta chupar mucho porque la situacion ya le había empalmado bastante, pero lo tuvo un rato asi. José chupaba con ansia pensando en que, si le hacía correrse, no se follaría a Sonia, pero su intención quedo barrida cuando le dijo
    
    - Ahora voy a follarme a la zorra de tu mujer. Quiero que la tumbes en la mesa y le sujetes los brazos mientras lo hago.
    
    José fue hacia Sonia, le tendió la mano y la llevo hasta la mesa. Alli la tumbo bastante al borde para dejar su coño disponible para la penetración. Después fue hacia la parte superior de la mesa. Mira a los ojos a Sonia, y está comprendiendo, le dio los brazos, los cuales los sujeto con fuerza.
    
    Juan se acercó a Sonia y sin miramiento se la metió de un solo golpe. Mientras, le agarraba los pezones y ...