¿has cogido con una pálida en un callejón - Relatos Eróticos

¿has cogido con una pálida en un callejón

Cierta vez hubo una visita de supervisión en el trabajo, aparte de que se pasó revista de todo el equipo individual (vestuario, bibliografía, enseres) se revisaron también las áreas de responsabilidad de cada especialidad, por lo tanto salíamos ya tarde del trabajo, y para acabarla de amolar con todo el estrés que se pueda imaginar, una de esas un sábado me toco salir a las 10 de la noche, y para bajar el mal humor y la tensión antes de irme me di una ducha con agua fría, cuando salí de la unidad de repente tocaron un claxon y al voltear vi que era uno de los Jefes de unidad diciéndome que iría al centro, que para que no caminara sola en el camellón que si quería me daba un raid, aceptando me subí a su carro

Íbamos hablando de cosas del trabajo, de repente empezó a decir que como al otro día seria domingo y no se llegaría a trabajar se antojaba aventarse unas cervezas para descansar tranquilos, yo sola me dije este ya quiere tirar anzuelaso y ver que pesca, pero en eso estaba cuando pasamos por la avenida central y le dije “así es Jefe, de hecho me esperan acá cerca”, y vi que le cambio el rostro, ya medio decepcionado me dijo “pues si tienes cita dime donde te dejo” de repente le indiqué una esquina y se estaciono, ahí se quedó esperando a ver dónde me metía, como estaba cerca la libélula me dije “pues me echo mi bebida y provechando que mi negra me saque el bochorno” despidiéndolo entre al local

Me fui directo a la barra, mirando hacia donde ella acostumbraba a buscar sus clientes, ya con esta serian 3 veces que me daba mis revolcadas y me dejaba mirando estrellas cuando profanaba mi recto con su enorme alíen, pero no la miraba, pedí una michelada y espere que me sirvieran mi bebida en la barra y con la mirada buscaba a mi negra, de repente escuche una voz que dijo “le salieron clientes, se fue con tres morros, le van a hacer una buena lluvia de esperma” voltee a ver y en una mesa habían cinco chavas, al verlas me dije “¿de dónde saldría este quinteto?”

Una con camisa de mangas largas pero arremangadas hasta los codos, a cuadros blancos y grises, pantalón de mezclilla, con algunos kilos de más, otra emulaba ser una clásica latina, camisa de manga corta a cuadros rojos y azules tenía varios tatuajes en los brazos, otra morena obscura, camiseta deportiva y pantalón de mezclilla, ambas prendas blancas, tenía cabello largo y teñido de rubio, otra, morena, gorda, cabeza rapada, usaba ropa tipo leñador, cabeza rapada, de ojos pequeños se relamía los labios, hay lesbianas masculinas, pero estas rayaban en lo que representaban, la última cabello lacio, el corte hasta debajo de las orejas y con cortes en la muñeca su piel muy pálida, sus ojos delineados tipo vampiresa y sus labios pintados de labial negro, pero de las otras cuatro fue la que más me llamo la atención.

Sonriendo les dije “gracias por la información”, espere a que me sirvieran mi pedido, yo iba vestida con mayón negro a la cadera, top deportivo negro y chaleco de mezclilla, ...