Noche para dos y mañana para tres - Relatos Eróticos

Noche para dos y mañana para tres

NOCHE PARA DOS Y MAÑANA PARA TRES

Elena se acababa de incorporar al trabajo. Se encontró con buena gente y se llevaba bien con todos, pero trabó especial amistad con Alicia y Julia. Juntas, incluso planearon ir a un concierto de un grupo que les gustaba a las tres. Después del concierto pasarían la noche en casa de Elena, ya que esta disponía de un chalet cerca que acababa de comprar con unos ahorros que tenía.

Quedaron el viernes a las ocho de la tarde tras el trabajo. Aparcaron el coche en la casa de Elena y fueron caminando hasta la zona donde se realizaba el evento musical. Al ir antes pudieron elegir el sitio. Escogieron uno en la mitad y un poco ladeado, pero cerca de la barra del bar y cerca de baños y salida.

A Elena le gustaban las dos chicas. Nunca habían hablado que era lesbiana, aunque sabía que en la empresa corrían rumores sobre su sexualidad. Pidieron una copa y se acodaron en la barra esperando a que empezase la música. A la segunda copa Alicia que era la más abierta a la hora de hablar preguntó a Elena:

No se si te va a molestar la pregunta, pero te la hago de buen rollo: ¿No te he visto con ningún chico, tienes novio?

Elena hizo primero un gesto de disgusto que luego se transformó en una sonrisa pícara y dijo:

¿O novia no?

A Alicia le entró la risa y a Julia casi se le atraganta la bebida.

¿Entonces eres lesbiana? ---- preguntó Alicia demostrando que no tenía vergüenza o su insolencia.

Oye, Alicia, esas cosas no se preguntan….Recriminó Julia.

No importa que pregunte, digamos ni que no ni que sí. Hago un poco lo que me apetece en este momento y ahora, la verdad no busco nada. ¿Satisfecha la curiosidad? --- respondió Elena.

Ya empezaba el concierto. Al de unas cuantas canciones Elena fue al baño, cuando volvió no había sitio al lado de sus amigas, pero sí detrás de Julia. Julia la vio ponerse y la sonrió. Elena conforme pasaban las canciones se acercaba más y tocó con su pelvis el culo de Julia que pensó primero que era un accidente, pero cuando volvió a repetirse y no fue un milisegundo, sino que se recreó un poco más.

Julia, pensó que era raro, pero después se dio cuenta que la situación en lugar de incomodarla la empezaba a excitar por el morbo. Elena se dio cuenta que la chica no se movía, sino que incluso echaba su culo hacia atrás de manera disimulada. Elena entonces con su dedo dibujó un corazón en la mano izquierda de Julia. Después rozó con su dedo la goma del tanga y Julia se dejó hacer. Luego se inclinó sobre Julia y cuando Alicia fue al baño aprovechó para inclinarse sobre Julia y le susurró:

Esta noche cuando Alicia se duerma tú duermes, por decirlo finamente, en mi cama.

Julia iba a protestar, pero se dio cuenta que se iba a dejar llevar y no lo hizo. Cuando terminó el concierto las tres mujeres cerca de la cuarentena caminaron hasta la casa de Elena. Hacía una noche de esas que llaman tropicales. Cuando llegaron subieron a la primera planta. Allí estaban las habitaciones. ...