1. Diario de confinamiento (11)


    Fecha: 21/07/2019, Categorías: Incesto Autor: reybaco2005, Fuente: SexoSinTabues30

    ... Yo estaba colorado y emocionado. Creo que estaba a punto de ponerme a llorar en ese momento. Sonia de repente y luego de una cara de confusión que duró apenas unos segundos, entendió todo, se dio cuenta y una lágrima le rodó por la mejilla. Me abrazó con una fuerza tremenda y no me soltó. Yo sentía la humedad de sus ojos en mi pecho y traspasando mi remera.
    
    – GRACIAS, me dijo y me besó en la boca, primero con esos tiernos y cortos que fueron transformándose lentamente en besos más apasionados y largos
    
    – Nada que no te merezcas
    
    – No está bien que lo diga, pero creo que es el mes más lindo en mi vida también, me dijo con culpa
    
    – Bueno, ahora creo que lo que debemos hacer es una sola cosa, le dije
    
    – ¿Que?
    
    – ¿Que va a ser? Comernos este tremendo desayuno, ¡¿o no?!
    
    – Claro, claro dijo mi hermana y juntos empezamos a devorarnos todo
    
    Me puse a trabajar un rato y sonó el timbre, era para mí, la entrega de MercadoLibre, bajo yo, le dije y agarré unos auriculares que tenía en mi mochila con una bolsita y mi teléfono. Subí rápido y Sonia me pregunto: ¿quién era? De MercadoLibre, me pedí unos auriculares porque se me habían roto los míos, le dije con los chocolates dentro de mi bóxer y tapados por la remera y el pantalón.
    
    – Ah, dijo ella.
    
    – Almorzamos liviano, le propuse, ¿o queres las hamburguesas ahora?
    
    – No, a la noche
    
    – Ok, le dije
    
    – ¿O vas a ir a lo de Fiorella?
    
    – Ni loco, es tu cumpleaños, estoy todo para vos, le dije
    
    Pude ver que muy íntimamente ella anotó esas palabras como un triunfo sobre Fiorella. Tenía celos y
    
    – ¡Qué bueno! Me dijo y me besó en a boca nuevamente
    
    – Mmmm, la besé
    
    – ¡Entonces hamburguesas y cervezas esta noche! Muack
    
    Fue así que almorzamos una ensalada y seguí trabajando. Sonia habló mucho con su marido que ya la había saludado a las 12 de la noche para ser el primero. Él le decía que era el primer cumpleaños que pasaban separados y yo pensaba que en todos estuve yo, incluso en este.
    
    A eso de las 6.30 pm ya empezaron los mensajes de mi mamá. Salimos con tu padre. Vamos para allá. Estamos por Juan B Justo. En 5 minutos estamos. Así que bajé con la excusa de que iba al quiosco a comprar algo y esperé a mi papá y a mi mamá que llegaron puntuales. Bajamos las bolsas del auto con la comida y la bebida para 10 personas, aunque éramos 4.
    
    Fui abrir la puerta y Sonia los vio y se puso a llorar como una nena. A mí también se me caían las lágrimas. Mi mamá y mi papá estaban igual. Era todo emoción y sobre todo para mis padres y su relación con su nieta que veían después de más de un mes. Sonia no podía creer que yo había organizado esto y ella ni se había imaginado.
    
    Fue así que comimos, de todo, hasta una torta chiquita había traído mi mamá. Abrimos una gaseosa y una cerveza y comimos todo lo que había preparado mi mamá: sándwiches de matambre, fosforitos de jamón y queso, sacramentos de jamón crudo, salchichitas con mostaza, albóndigas con salsa de tomate. De todo. Cada cosa en ...