1. Del infierno al paraíso


    Fecha: 27/09/2022, Categorías: Fetichismo Autor: jose-sk, Fuente: SexoSinTabues30

    ... tenía muchas ganas de cagarse en mi boca). Le dije que sí, pero que también tenía mucha sed, que no había bebido nada en todo el día, y que si ella podía darme algo para beber. Me dijo que estuviera tranquilo, que no iba a quedarme con sed. Se bajó sus braguitas y se puso encima mío, yo veía ya cerca su hermoso coño, cada vez estaba más excitado, además de la erección la puntita de mi pene ya se estaba mojando al ver su vagina tan cerca de mi cara.
    
    Marta me preguntó cómo quería que me meara. Le pedí si podía pegar mi boca a su coño mientras lo hacía. Se bajó un poco, medio de pie medio en cuclillas, no quería bajar más para que no se le escapara ya la caca, pero era lo suficiente para que yo pudiera levantar un poco mi cara y pegar mis labios a su coñito. Apenas mis labios rozaron su coño, Marta empezó a mearse en mi boca, a chorro. Era una orina muy amarilla, muy concentrada, con un sabor a pipí muy intenso, no quedaba ni rastro del sabor de lo que había bebido antes, su cuerpo lo había destruido completamente. Yo tragaba lo que podía, pero, como siempre, era imposible seguir el ritmo de ella, a la que me di cuenta mi cara ya estaba cubierta de pis.
    
    Cuando terminó, me ordenó que me tumbara boca abajo, y que me bebiera todo el pipí que quedaba en el suelo. Con una pajita, poco a poco me lo fui bebiendo todo. El sabor era muy fuerte, pero al mismo tiempo muy sexy, muy excitante. Cuando terminé, se puso encima mío, yo mirando arriba de nuevo, y se volvió a mear en mi cara. Me ordenó que volviera a limpiar el suelo. Yo había perdido la pajita, así que lo lamí del suelo, de nuevo yo era un perrito a los pies de su ama. Una vez limpio, me acercó el pie, era precioso, le di algún beso, pero no por mucho tiempo, era su culito el que estaba a punto de reclamar mi atención.
    
    Se puso de pie sobre mí, apoyada sobre el cabezal de la cama, mostrándome su culo en primer plano. Le pregunté cuánto hacía que no cagaba, me respondió que un día, que era muy regular. Me dijo que tenía muchas ganas, que ya no se podía aguantar más. Le pedí si podía intentar aguantar algo, para poder besarle un poco el ano, y que cuando ya no pudiera más lo soltara en mi boca. Tras tantos meses de espera, por fin mis labios volvieron a besar su ano, lo besé con mucha pasión, le di algunos besos más, le dije que me encantaba besar su ano, que amaba su sabor. Ella me dijo que ya no podía más, que se cagaba ya, me dijo «ahí viene».
    
    No se veía nada todavía en su culo, ni siquiera se escuchó ningún pedo, pero se empezó a notar un olor muy fuerte, olía mucho a caca. Por el olor ya vi que se me venía encima algo grande. Respiré todo lo que pude, me volvía loco ese olor, viniendo de un trasero tan bonito, y aún más sabiendo el regalito que estaba a punto de depositar en mi boca. Enseguida volví a besar ese agujero que tan loco me volvía, pegué mis labios lo más que pude, necesitaba sentir la mierda de Marta dentro de mí. Unos segundos después sentí su ano abriéndose sobre mis ...
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