Una pareja swinger - Relatos Eróticos

Una pareja swinger

... gustaste mucho, y la verdad, creemos que eres muy buena en la cama.

-Bueno, favor que me hacen, pero debieron habérmelo dicho desde un principio; bueno, yo he tenido varias experiencias lésbicas, así que no veo por qué no podemos pasarla rico.

A ambas les alegró mi respuesta, por lo que Mónica dijo que fuéramos a su casa, porque ahí estaríamos más cómodas, pagamos la cuenta y nos fuimos a la casa de una de ellas.

Media hora después, llegamos a nuestro destino, la verdad, mas que casa era un departamento, pero muy bien decorado, con muebles de madera y motivos color naranja con blanco.

De inmediato, Liz besó a Mónica muy rico, verlas me puso cachonda, me acerqué y Mónica estiró su brazo para jalarme a ellas, ambas me abrazaron y me comenzaron a a acariciar, ella me besó muy rico, mientras Lizme tocaba las tetas sobre la ropa.

Las tres nos quitamos la ropa, quedamos desnudas muy rápido, me pidieron que me sentara y eso hice, Mónica separó mis piernas y me vio la panocha, solo sonrió muy maliciosamente, mientras Liz comenzó a mamarme las tetas mi anfitriona me dio una rica mamada en la vagina, sentí su lengua muy rico, entraba y salía de mí, también metió dos dedos en mi rajita, Liz me besaba muentras acariciaba mis tetas, ella me decía que le fascinaban.

Mientras Mónica estaba ocupada entre mis piernas, Liz me dio sus tetas y comencé a chupárselas, estaba muy ricas, no muy grandes, pero me gustaron mucho y más su sabor ,le acaricié la espalda y fui bajando hasta tocar sus nalgas.

Ménica me dejó de chupar la panocha y subió a mis tetas me las mamaba muy rico,me voltee para que dieran por el culo, no hubo necesidad de decir palabras, ellas entendieron perfectamente lo que quería, por lo que Mónica comenzó a darme una rica mamada de culo, Liz solo nos veía cómo lo hacíamos, aunque la verdad, yo quería cogérmela, pero primero dejé que ellas me cogieran rico.

Entre las dos comenzaron a besarme las nalgas, Liz también disfrutó de mi culo, mientras Mónica me dedeaba rico, no tardé en acabar estaba muy caliente por la forma en que me dieron rico.

-Ay Faby, que rica estás, ¡coges riquísimo!

-Gracias, pero también estuvieron ustedes muy bien.

-Ahora, me gustaría verte con Liz, es una mis fantasías, verla con otra chica.

No me lo dijo dos veces, acosté a Liz boca arriba y separé sus piernas, comencé a tocar su sexo, ya estaba muy húmedo, así que tuve que calentarla más aún, comencé a estimular su clítoris, mentras ella se tocaba las tetas, Mónica no perdió detalle de cómo me la cogía; su vagina sabía deliciosa, pero me sentía rara tener sexo con una chica delante de su novia, y más que ella me pidió cogérmela.

Levanté más sus piernas y su culo quedó a mi disposición, por lo que comencé a darle rico, los gemidos de Liz me excitaban un chingo y en eso, Mónica se sentó en la cara de Liz para que le diera una mamada, las tres estábamos gozando mucho, yo me tocaba mi clítoris mientrasmamaba la vagina de Liz.

Al poco tiempo ...