Una pareja swinger - Relatos Eróticos

Una pareja swinger

Luego de una semana de mucho trabajo, quería algo para relajarme, pensé en ir al spa, pero me dio hueva, pero tampoco no quería quedarme encasa, así que decidí ir al bar, para oir música y si se podía, ligar aalguien.

Mis amigas no aceptaron la invitación, tenian otros compromisos por lo que me decidí a ir sola, no sería la primera vez que lo haría; me di un baño lo hice con calma, aproveché para acaricarme y tocarme, lo hice muy rico, pensando en lo bien que me la pasaría en la noche.

Salí, tomé un poco de agua, tenía sed, no tenía prisa por arreglarme, lo hice con calma; una hora después, estuve lista, salí y me dirigí al bar, para pasar una buena noche tranquila y con la esperanza de pasarla bien.

Media hora después, llegué a mi destino, entré al bar, había poca gente, el grupo ya estaba tocando y me dirigí a la barra pedí una cerveza, me dispuse a disfrutar de la música y del ambiente que había en el lugar.

Llevaba como tres cervezas e igual número de cigarros, la pasaba muy bien, le pedí a la bartender otra bebida, tomaba muy despacio para que no se me subiera, saludé a unas conocidas que llegaron, me preguntaron como me iba, es presondí que bien y que vine sola, ellas se disculparon, ya que iban a estar en otra parte del bar, me despedí de ellas y volvía lo mío.

Más tarde, sentí que me miraban, seguí tomando, cuando sentí que alguien se sentó a mi lado, era una chica morena muy linda, no muy, alta buen cuerpo, tenía tetas medianas y pidió algo de tomar.

-Hola, soy Mónica, mucho gusto ¿y tu?

-Soy Fabiola, mucho gusto, ¿te gusta aquí?

-Sí, mucho, disculpa que sea directa, pero nos llamaste la atención, eres muy guapa y sexy.

-¿Nos? no entiendo.

-A mi novia y a mí, es la que está allá, te vimos desde hace rato, y como te dije, nos gustaste.

Le agradecí el cumplido, pero me sacó de onda su comentario, ella me sonreía mucho, como si quisiera caerme bien, y lo conseguía; me dijo que si quería conocer a su chica, acepté (aunque lo pensé un poco) y fuimos adonde estaba ella.

Caminamos un poco y llegamos a una mesa, donde estaba otra chica de cabello oscuro, su nombre de Lizeth, de 23 años , Mónica tenía 26, ambas eran pareja desde hace un poco más de un año y se llevana de lujo, lo cual me dio gusto y las felicité.

Estuvimos platicando un buen rato, tal vez un par de horas, Lizeth no dejaba de mirarme, ella pidió otra ronda, pero yo intuía que me ocultaban algo, así que sin decir agua va, les solté la pregunta.

-Hay algo que no me dicen, ¿por qué estoy aquí?

-Lo siento , Faby, es verdad, lo que pasa es que queremos hacer algo rico contigo, es que desde que te vimos, nos pareciste la chica ideal para estar con nosotras.

Mónica me contó que desde hace semanas, habían platicado acerca de tener un trio o un intercambio de parejas, de hecho, asistieron a una reunión donde los swingers eran el alma de la fiesta y tuvieron algo que ver con otras personas, pero ellos deseaban estar con una mujer.

-Nos ...