Disfrutando la Infidelidad con 2 pendejos - Relatos Eróticos

Disfrutando la Infidelidad con 2 pendejos

La mayoría de matrimonios, por no decir todos, eventualmente llegan a un punto gélido. El modelo tradicional, conservador, dicta estar juntos toda la vida, pero la felicidad no está presente en todo ese periodo. Llega el punto en donde es un fastidio estar con tu pareja, la llama se apagó hace mucho tiempo, y ahora por algún motivo sigues ahí, presión social, las miradas de tu círculo cercano y no tan cercano que arrojaran todo su desprecio si es que no sigues junto a tu pareja. Juntos por siempre, por desgracia.

“¿Por qué sigo aquí?”

Era lo que Úrsula se preguntaba mañana, tarde y noche. A la vista de todo su esposo era el marido perfecto, trabajador, atento y con una eterna sonrisa. A la vista Úrsula era un adicto al trabajo, ausente y con un mal genio cuando dormían en la misma cama.

Era la pareja perfecta en las reuniones a las que asistían, produciendo sonrisas y encanto en sus amigos. Quizá Úrsula quería mantener estas sonrisas, quizás no podría soportar la decepción de sus amigos si es que se separaba de su esposo Saul.

Los más allegados a Úrsula pensaban: “¿Cómo una mujer tan bella como ella puede seguir con ese infeliz?” estos le comentaban esto a Úrsula. Hubo una vez en la que Roy, amigo intimo de Úrsula le sugirió una posible infidelidad, “No lo entiendo, mujer alta, bien culona y con unas tetas de infarto sigue con ese batracio, si yo fuera él te aprovecharía todas las noches, es más, por qué no nos escapamos, no te mereces esto” – Comentó Roy. Estas palabras sonrojaban a Úrsula, no recordaba hace cuando le tiraban un piropo como ese, pero aún pegada al estándar tradicional de mártir, no podría cometer un acto así, aunque ganas no le faltaban

¿Merecía la pena seguir con su esposo Saul?

Todo en su mente indicaba que sí. Úrsula siempre ha sido una mujer que priorizaba la felicidad de los demás antes que la suya, a soportado de todo, insultos, gritos irracionales, incluso las sospechas de que su marido le estaba siendo infiel, aquella ocasión en la que llegó ebrio y se quedó dormido e el sofá, no dejaba de recibir llamadas de una tal Dayana♥.

Le hirvió la sangre por un momento, tanto tiempo de sufrimiento ¿y ahora esto? ¿Dayana? No le sonaba ese nombre.

Pero aún con todo esto ella aguantó, se contuvo todas estás humillaciones…hasta que llegó la gota que derramó el vaso.

De regreso del cumpleaños de la tía Vilma la pareja tuvo una de las discusiones más fuertes de toda su relación. Armada de valor la mujer le gritó a su esposo…

“Ya no aguanto más, esto se acabó”

Dijo, ya no soportaba más a Saul. El hombre la tomó fuerte del brazo y con una mirada fría le dijo todo lo que tenía que saber: “Nada iba a cambiar, todo seguirá igual”.

La intención de Saul era intimidar a su esposa Úrsula, pero hizo todo lo contrario. ¿Qué derecho tenía este cerdo de pedirle algo? Aun cuando era él quien estaba siendo infiel.

Las palabras de Roy resonaban en la cabeza de Ursula: “no te mereces esto”

Días después de ...