Mama ayuda a la vecina y yo las ayudo a las dos (Parte 3) - Relatos Eróticos

Mama ayuda a la vecina y yo las ayudo a las dos (Parte 3)

... sus bocas exageradamente abiertas se juntaban y una le daba de beber a la otra su pasión, antes de sacarle la pija de su interior le pedí a mi madre que tomara mi lugar detrás de ella y con su boca juntara la leche que saldría de su vagina, lo hizo sin protestar, le prohibí que se los trague, en cambio las obligue a besarse con mi leche en su boca.

Nos quedamos toda la tarde retozando como animales en celo, nuestros cuerpos no se cansaban de experimentar placer, no había limites, todo aquello que nos daba placer era valido, y nuestros cuerpos nos reclamaban placer de forma constante, entramos en un espiral de sexo y sexo y mas sexo, las mujeres eran ninfas dispuestas a dejarse usar y nunca lograban calmarse, siempre deseaban mas, cuando mi pene no podía con ellas, sus lenguas se daban el placer que ellas requerían.

Nos fuimos y dejamos a Margarita en la cama, totalmente desnuda con todos sus agujeros usado y con unas marcas bordo en sus pechos, de su ano y de su vagina escurría el semen que había depositado en ella, no tuvo fuerzas para despedirnos, se quedo dormida y en su cara solo se reflejaba el placer de una tarde de lujuria, volvimos a nuestra casa no sin antes lavar nuestros cuerpos, apestábamos a sexo.

-Mama te amo.

Ella me sonrió y acaricio mi cabello.

-Seras padre de dos mujeres, hoy por la mañana Margarita me contó que estaba en sus días fértiles….

CONTINUARA….