1. Después del divorcio


    Fecha: 10/03/2019, Categorías: Lesbianas Sexo con Maduras Autor: Indioram, Fuente: SexoSinTabues30

    ... estaba lista para irme a trabajar dejé que acomodara todo y nos fuimos. En la tarde, llegaba a casa, cuando al momento también llegaba Sabrina, nos saludamos de beso en la mejilla y se puso a hacer sus tareas, yo por mi parte, me fuí a mi habitación me desvesti y me puse una bata, quería aprovechar la oportunidad para ver si puedo hacer algo con la niña que me estaba volviendo loca. Al pasar por el comedor, Sabrina se me quedó viendo, pero siguió con sus tareas mientras yo cocinaba algo para cenar las dos. Media hora después, terminó sus tareas y decidimos cenar, le comencé a preguntar y hablamos sobre el colegio, sus gustos y cosas banales hasta que en un momento ella me dijo: – Mireya, la verdad te ves muy bonita, crees que cuando sea grande seré como tú? – Claro que sí sabri, inclusive ahora tú estás hermosa así que de grande serás más hermosa. Diciendo esto, le empecé a acariciar el cabello de manera seductora, por un momento pensé que la niña se iba a asustar, pero ella solo miraba y sonreía sonrojada, luego le acaricié su mejilla y me acerqué a ella, me dejé llevar de mi instinto y le robé un beso. Ella me miró sorprendida abriendo esos ojitos verdes, pero no fue agresiva ni nada, así que tomé su mentón y la volví a besar, esta vez más apasionado y más lujurioso, la niña se dejó llevar por todo lo que le hacía, mientras la besaba tome su cintura y la acariciaba, la niña empezó a gustarle, luego paré y le dije : – Vamos a mi habitación. Luego la tomé de la mano y caminamos hacia la habitación yo adelante ella atrás, aproveché para contonear mi trasero y alcancé a observar que ella lo miraba como perdida, al llegar a mi cama, volví y la tomé y la bese, aún llevaba su uniforme de colegio, una jardinera azul con una camisilla blanca, procedí a besar su cuello, ella respiraba pesado, luego lentamente, bajé la cremallera de su jardinera y la fuí quitando lentamente, ella estaba sonrojada y acalorada pero su cara me decía que quería más, procedí a desabotonar uno por uno y de forma sensual los botones de su camisita, al quitarlos no tenía tan siquiera un top, me mostró unas tetitas rosaditas, un ombligo hermoso y tenía unos calzoncitos rosaditos con una rosa en el centro, la acosté en mi cama y empecé a lamer su cuello nuevamente, bajando a sus tetitas las cuales empecé a chupar con mucha alevosía, Sabrina respiraba cada vez más pesado y empezaba a mover su cabeza, luego bajé hasta su ombligo el cual pasé su lengua y logré sacar el primer gemido de la niña, no podía aguantar y decidí quitarle su calzón, al hacerlo decidí olerlo, y su olor me excitó sobre manera, luego procedí a cumplir con un morboso deseo y era tener fotos de una mujer desnuda, con mi celular le tomé la foto a Sabrina, la guardé y seguí haciendo mi trabajo, pasé mi dedo por su vaginita rosadita virginal, por un momento sintió miedo, pero luego de volverla a besar, mojé mi dedo con saliva y lo intenté introducir en su vagina, me demoré ya que era muy estrecha, cuando pude meterlo, ...