Dos parejas diferentes, un mismo destino... - Relatos Eróticos

Dos parejas diferentes, un mismo destino...

... más ja ja, al estar pegado a mí, su bulto se me clavaba en mi ingle lo tenía a tope, me besaba, me acariciaba mis pechos, yo se la cogía a él y notaba un buen paquete, así hasta que intento meterme mano a mi entrepierna y le dije mira, aunque nadie sabe si somos pareja o no, no está muy bien dar el espectáculo porque algo de gente había, nos fuimos a una orilla retirada y que unos sauces de esos llorones bajaban sus ramas casi hasta el agua y era mucho más discreto, cuando llegamos ya no había quien lo sujetara ja ja, me cogió contra la pared del lago que era de piedras y cemento y nos llegaba el agua al cuello, bueno a mi hasta justo la boca, me hizo de todo, me decía que me tenía ganas desde que vio mis pechos, me los subía para poder chuparlos, me metía los dedos en mi coño, y quería masssss, le dije, mira ayúdame a sentarme arriba en el borde, así lo hizo, y nada más sentarme me saco para abajo el bañador y me dijo separa las piernas y empezó a comerme el coño, me dijo si me dejaba penetrar y le dije que sí, no llevábamos goma ninguno claro, pero pensando que el por lo menos solo tenía relaciones con su pareja, era muy difícil coger enfermedades, le comente que en el agua y con esa profundidad era muy complicado, me baje otra vez y me puso a mí de cara a la pared y el por detrás pero con el agua al cuello era muy difícil y eso que la tenía dura, dura, pero en cuanto me la metía yo con esa tranca me moría de gusto, más por la excitación y el morbo de la situación, así estuvimos un rato, me penetraba, pero enseguida se salía, hasta que nos pareció ya buen rato sin aparecer por nuestras parejas, me dijo, no te voy a dar la braguita del bañador, vas a ir como tú sabes desnuda a las tumbonas, yo le dije riendo, si no me la das ya no me catas más, al llegar, ellos estaban sentados los dos en la misma tumbona, nos miraron y se echaron a reír, y ella le dijo a él señalándole su paquete, que te ha pasado ¿? Le contesto, ya te contare y ya nos sentamos con ellos, como nadie sabía quién era pareja de quien, ya nos tocábamos como si nada, si no nos veía gente pues un poco más y ya era eso él no va más…. Luego me conto José que ellos habían estado hablando, que le había dado crema por todos los pechos y entre pierna, incluso una vez se le puso su polla con disimulo y de espaldas a la zona de gente y se la había chupado, pero ella le había dejado claro que con ella penetración nada.

Después de cenar nos fuimos a la terraza, nos habían dicho los chicos que teníamos que salir sin braguitas esa noche las dos si no, no había marcha ja ja, a mí ya me daba miedo ja ja las dos con vestidos cortos, el mío no necesitaba sujetador, me imaginaba las dos sin bragas, nos sentamos ya parejas intercambiadas al lado y no paramos en toda la noche cuando no era muy descarado de sobarnos, en una ocasión las dos medio tumbadas en el butacón con los ojos cerrados y suspirando y ellos metiéndonos manos sin ningún obstáculo, yo cuando no se veía nadie él se encargaba de ...