Dos parejas diferentes, un mismo destino... - Relatos Eróticos

Dos parejas diferentes, un mismo destino...

... liberal con otra no liberal, nos mirábamos más, sobre todo ellos a nosotras, José me daba crema a mí por la espalda y los pechos, el no quitaba ojo, y alguna vez me hacía gestos con los ojos, o con los labios y yo le devolvía con una sonrisa, ese día ya el chico también le daba crema a su pareja y nos miraba como invitándonos a mirar ja ja en una ocasión nos fuimos al agua los cuatro y en un sitio discreto nos hacíamos cada cual con su pareja arrumacos besitos creemos intuimos que ellos por debajo del agua algo más, nosotros sí, y supongo nos vieron porque lo hacíamos descarado, y así con situaciones morbosas y excitantes pasamos la tarde. En la cena esa noche bebimos un poco más de vino que otros días y nos fuimos a nuestra terraza ja ja ja, es verdad se estaba muy bien allí, discreta, casi no había gente, algún día a partir de las 12 incluso nos quedábamos solos y como estaba un poquito oscura pues … Esa noche yo llevaba una camisa transparente un sujetador de copas bajas que me subían mis pechos más hacia arriba, lo que casi me daba una talla más y una minifalda cortita, cortita, la otra chica llevaba un vestidito, no muy corto pero sexy y con un poquito escote, total acabamos las dos sobadas ya con descaro por nuestros maridos, el chico a su pareja una vez le subió un pecho por el escote y le chupo un pezón a ella, José en una ocasión yo medio tumbada en el butacón que había sin tener que subirme mi falda pues ya así sentada se me veía mi tanga, me quito el hilo de mi tanga y me metió el dedo como si me follara, yo cerraba los ojos y suspiraba para excitarlos más, tanto que como estaba al lado del chico el llego a ponerme la mano en mi pierna por encima la rodilla y la subió un par de veces sin llegar arriba, y fue el primer contacto carnal, el segundo no tardó en llegar ja ja, en el pasillo de las habitaciones él iba el ultimo y yo delante, me subió mi faldita y me llevo con la mano en mi culo hasta la puerta de la habitación, nadie se dio cuenta.

Al otro día comida y lago ja ja ja. El ambiente ya estaba cargado y José había hablado con el chico a solas… habían quedado en que si a nosotros no nos importaba puesto que hacíamos intercambios y tríos pues que nos iríamos al agua el chico y yo y bueno pues lo que surgiese si no le molestaba a José, y el con su pareja en la tumbona pues lo que pudiese, pero que su mujer le había dejado bien claro que de penetraciones ni agua. Así lo hicimos, pero yo ya notaba al chico que ese día un me miraba más excitado y varias veces me rozaba la pierna, el brazo o hasta mi culito, y el bulto en su aparato todo el rato, a media tarde, como acordaron yo me fui al gua, sin decirle nada a la chica pues otras veces nos íbamos las dos, al momento llego el, yo mientras entraba en el agua, ya se veía claro la excitación que traía, se me vino hacia mí, y sin rodeos ni tonterías, me cogió de la cintura y me atrajo hacia él, y me dijo que desde les dijimos que éramos liberales, se había excitado en poseerme y mucho ...