1. Sometida en la bodega parte 1


    Fecha: 05/06/2019, Categorías: Dominación / BDSM Hetero Autor: Manossexys, Fuente: SexoSinTabues30

    Si algo nos cachondeaba con Karina era saber de nuestros pasados y preferencias en términos de anatomía de los amantes que deseábamos. También nos calentaba hacerlo drogados para lo que descarguë una app para conseguirlos. Debo admitir que cometí el error de subir una foto en calzoncillos y proliferaron no solo las ofertas de drogas , sino que se atributos falicos. Le xomenté a mi pareja que mi bandeja de fotos estaba llena de vergas, lo que despertó su curiosidad y me pidió que le mostrará los penes que me llegaban por GrindR esa tarde-noche que buscábamos droga para saciar nuestra autodestructiva forma de sacrificarnos en un placer que se constituía de tiradores de coca, nalgadas, esposas, gagball, látigos, cegadoras, un dildo, un vibrador ( que estrenamos esa noche)y un collar con el que la paseaba por el departamento hacia alguno de sus lugares en los que decidíamos follar. De todo ese lugar había uno que no había sido testigo de nuestra perversión y era la bodega. «Ya, POS, a ver los penes que te enviaron. Oh, la mansa wea. Y eso le entra por el ano a alguien. A mí no me cabe ,amor». » Y por tu concha si te dilato, si te la chupo ?» «Mmm ,tal vez. Es casi tan gruesa como una lata, pero no, me rajaría, me gusta que me duela, me va a rajar, así que no, olvídalo. Por eso tampoco te paso la colita, Amor, porque tu cabeza es muy gruesa y cuando me lo haces por adelante o en cuatro vaginal me has hecho daño. No, no era principio de regla, me rajó tu verga». » Y la de tu ex? Me dijiste que la tenía grande, más grande que la del otro amante que tenías en ese entonces». «Era un poco menos gruesa», confesó entre avergonzada y sofocada por el recuerdo de tener ese miembro en su concha siempre jugosa y completamente depilada. «Ya, pero no quiero hablar de eso. O quieres que te pregunte yo a ti si has penetrado a mujeres por la cola? No quiero saber cómo fue porque yo no puedo pasàrtela». «Y cuándo estabas en esa relación consensuada con dos hombres a la vez, nunca te plantearon un trío con doble penetración?» «No, nunca», contestó rápidamente, lo que me dio la impresión de que evitaba el tema, porque me parecía poco creíble que no haya recibido una propuesta por una doble ración de verga. No insistí porque la fantasía me hizo planear una forma de que dos juguetes entrarán en sus cavidades, pero sería en forma de castigo. «Me contestó el dealer habitual, dijo que llegaba en 30 minutos. Alcanzamos a hacer algo, me calentó saber que te metían penes más grandes que el mío, pero me dio rabia a la vez por no poder hacerte gritar como debes haber gritado con esa carne gruesa dentro tuyo, apretada por tu vagina estrecha y húmeda. Creo que ahora estoy enojado y deberé castigarte por querer ver otras pingas y recordar la de tu ex». «Ay, bebé era grande, pero no se le paraba siempre, tenía que tocarlo, chupársela, bailarle, usar juguetes para excitarme y calentarlo». «Te metías el dildo de 20 CMS. Era más grande o más chico que la de él?» » La suya era más ...
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