Yo amo el patriarcado - Relatos Eróticos

Yo amo el patriarcado

... cara.

Jamás pensé sentirme tan mal, tan poca cosa, tan inexistente como ese día, mi amado estaba con otra y todo era mi culpa, por no ser lo que esperaba me dejaría y alguien más estaría a su lado. Esa noche casi no pude dormir y puntual a la hora de la cita llegue a su portal. Toqué y me dejó pasar.

Nos sentamos a la mesa y el comenzó a hablar.

Amo: A qué has venido?

Aeri: No quiero perderde, te amo y quiero estar contigo. Me dices un día que querías casarte conmigo, pero luego me dejas y te vas con otra mujer. Nada tiene sentido

Amo: Claro que lo tiene, tu y yo no somos nada en este momento y yo busco mi felicidad y tu no me la das, estoy cansado de pelear contigo y no quieres entender, te amo y quiero que seas mi esposa, pero no si sigues con esas actitudes, no pienso tolerarlo

Aeri: Yo haría lo que fuera por ti, solo dime que hacer

Amo: Estás segura? Esta será tu única oportunidad, te estoy dejando las cosas en claro y nada, escúchalo, absolutamente nada que vaya en contra de lo que te pida voy a torlerar y en ese momento se acaba todo.

Aeri: Si, pero por favor, no te vayas de mi lado.

Se levantó de la mesa fue a un cajón, sacó una pequeña caja, la abrió y me mostró un hermoso anillo de diamante

Amo: Para que veas que mis intencines son sinceras, yo ya tenía el anillo, te lo presento como muestra de mi amor, te prometo que habrá una pedida de mano que nunca vas a olvidar, pero esto viene con un precio y ese precio es tu vida... Aeri, no lo digo como una frase romántica o un verso de amor, lo digo de manera literal, este anillo y el privilegio de convertirte en mi esposa viene con el precio de ser mia y eso significa absoluta obediencia y devoción.

Entre lagrimas de felicidad le dije que sí. Me besó y me dijo que me fuera. Que a partir de mañana en la noche en la propuesta todo en mi vida cambiaría y así fue, 13 años después, aún puedo decir que converitme en su esclava es lo mejor que me ha pasado en la vida.

La pedida fue en un restaurante, una cosa muy romántica e intima, esa noche dormimos juntos y me hizo suya. Por la mañana, cuando desperté, fui a la cocina y lo vi a el sentado, desnudo, con una ereccción y un papel sobre la mesa.

Amo: Ven, sientáte quiero que leas esto - era un documento de 4 pagínas intensamente explícito donde explicaba como pasaba de ser un ser humano a un objeto, más precisamente su objeto, describía mis deberes y responsabilidades, que iban desde estar dispuesta a ser usada sexualmente las veces que él desee y como desee, sin límite de tiempo, fuerza o dolor, señalaba que terminando la universidad sería la boda y tras eso, me quedaría en casa y solo tendría permitido salir con su permiso, en general a partir de la firma, todo lo que hiciera tenia que ser con permiso, comer, masturbarme, salir o ver a cualquier otra persona, señalaba que debía darle al menos 2 hijos y el decidiría cuando en la relación y que de mi vocabulario debía desaparecer la palabra no, pues todo lo que el ...