El pequeño Alex, su padre y sus amigos 3.7 - Relatos Eróticos

El pequeño Alex, su padre y sus amigos 3.7

... pollas se movían en cada golpe o agujero que daba la camioneta en el pavimento, presionando un poco más o retirándose un poco de las entrañas de los niños.

Esta estimulación constante estaba volviendo locos de lujuria tanto a los niños como a los adultos. Los caminos rurales pueden ser difíciles en algún momento. Los dos niños pequeños tuvieron las pollas más duras y grandes de la historia, solo bastaba ver las gotas claras de precum.

Richie conducía cuidadosamente el automóvil que se movía lentamente con ambas manos mientras Josh acariaba suavemente la polla dura del niño y Danny había acercado al pequeño Alex a su pecho liso y lo estaba besando en la boca, sus manos ocupadas con los pezones del niño y la polla dura. Después de 15 minutos de esta placentera cogida, llegaron con los Jameson y dejaron a Becky. Josh condujo a su casa y dejó a Ethan y Darnell. Ambos muchachos se despidieron y agregaron «Diviértanse» con una sonrisa.

Finalmente, la camioneta se dirigió a los Clinton para dejar a Alex, los dos muchachos más jóvenes aún estaban siendo penetrados profundamente por dos pollas negras.

Cuando llegaron a la casa de Alex, Brenda, que acababa de regresar de visitar al padre John en el centro, caminaba desde el garaje, donde estacionó su brillante BMW 335i, hasta la puerta de entrada, con la pequeña Jenny siguiéndola de cerca. Josh detuvo la camioneta cerca de la mujer y bajó la ventanilla lateral. «Hola Brenda, ¿cómo está?» «Hola Josh, estamos bien, gracias, acabo de regresar del centro. ¿No es ese el pequeño Jameson en tu regazo?» respondió Brenda, un poco sospechosa.

Richie no pestañeó y volvió la cabeza para sonreír a la madre de Alex, «Buenas tardes, señora Clinton», dijo cortésmente, moviendo la polla dura de Josh y apretándola con su ano. «Hola cariño, ¿ya estás aprendiendo a conducir a tu corta edad?» preguntó Brenda. «Sí, señora, solo lo miré, ¡pero es MUCHO trabajo GRANDE y DURO!» el chico respondió con una gran sonrisa. Brenda estaba ahora más cerca de la ventana abierta y podía ver a Richie sentada en los regazos de Josh y Alex en el de Danny. Gracias a Dios, la única luz disponible provenía del tablero de la camioneta y una lámpara solitaria en el porche de la casa.

«Alex, ¿por qué te sentaste en el pobre chico en lugar del asiento? Ya no eres un niño pequeño, ¿sabes?» Brenda estaba un poco molesta porque Alex estaba sentado en su regazo. Dave anoche y Danny ahora, no era seguro para un niño, ya que el Padre John a menudo predicaba en misa, ese tipo de malas acciones. «Hola, Sra. Clinton», respondió Danny con una cálida sonrisa, «solo quería copiar lo que su mejor amigo Richie estaba haciendo aquí. No hay problema, ya sabe cosas de niños», y mostró a la joven esposa con una amplia sonrisa, mientras sus 23 cm de polla dura aún estaba alojada y retorciéndose en las entrañas de su hijo de 11 años.

Mientras tanto, Jenny había llegado al otro lado de la camioneta y de repente abrió la puerta para ayudar a su ...