1. Alegrando a un anciano


    Fecha: 12/05/2019, Categorías: Sexo con Maduras Autor: rolf, Fuente: CuentoRelatos

    ... evento se está haciendo algo aburrido
    
    —no se preocupe don, pronto vendrá una pequeña banda que tocara para ustedes
    
    —esos tipo hacen demasiada bulla, porque mejor no caminamos por ahí para hablar más cómodos
    
    —mmm no lo sé don, se hace tarde y caminar por estos lugares son algo peligrosos
    
    —ándale chamaquita, por esos lares soy respetado, de joven me gane mi respeto y ahora de viejo muchos me respetan por la zona
    
    El viejo se inventaba todo eso para vanagloriarse un poco y tratar de convencer a la joven, pero desgraciadamente todo eso era mentira, el pobre viejo solo era uno más de la calle nadie los respetaba y muchas veces los fumones lo golpeaban tanto a él como a otros viejos por mera diversión, su vida era patética, su única distracción era el licor y mirar a las jóvenes salir, admirar sus lindas piernas en esas faldas cortas que tan de moda estaban, ahora por fin tenía una chica que tenía el cuerpo muchos más rico y desarrollado que esas escuinclas y quería aprovechar al máximo ese momento.
    
    —que dices mi reina, yo te defenderé de cualquier matoncito que se atreva a faltarte el respeto
    
    La chica se quedó callada, realmente estaba debatiendo la oportunidad de irse con ese desagradable sujeto
    
    —pero acá estamos cómodos don, ¿cuál sería la diferencia de charlar por esos lugares horribles a charlas acá debajo de un techo y con algo para comer?
    
    —pues hablaríamos con más calmita
    
    —jiji claaaro, usted es un viejito muy mañoso, lo que quiere es seguir de tentón sin que nadie lo mire ¿verdad?
    
    —jaja eres muy lista chamaca, pero la verdad es que tus piernas se ven tan ricas que es imposible no tocarlas y son mi regalito de navidad, tú me lo dijiste
    
    —jijij en su juventud usted ha debido ser todo un casanovas, está bien don Eulalio caminaremos, pero solo era un ratito, tengo que regresar al menos para la clausura del evento.
    
    —para eso faltan horas muñeca, ya he asistido a estas pendejadas en años anteriores y siempre alargan las cosas, lo más probable es que se tiren hasta la noche, prefiero estar contigo belleza, con lo duro que esta la calle es probable que ya ni llegue a la próxima navidad.
    
    A la chica la invadió una lástima enorme, se sentía como una descorazonada si dejaba al pobre anciano que se veía físicamente mal, la chica se planteaba seriamente en darle un poco más de cariño a ese pobre y triste anciano cuando noto que una de las manos callosas del hombre empezó suavemente a tocar las duras y bien trabajadas nalgas de la chica, sentía esa mano juguetona palpar con total descaro, ahora si sus hábiles dedos se hacían espacio para meterse por detrás de la chica pero desgraciadamente fue interrumpido por el inicio de la banda de jóvenes que iban a tocar y su fuerte sonido.
    
    El débil anciano quedo frustrado ya que estuvo a centímetro de tocar esos cachetes pero gracias a esos mocosos y su exagerado ruido como si estuvieran en un concierto no logro su cometido. El rostro deslucido del anciano decía todo, Milly ...
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