Cele y sus amigas - Relatos Eróticos

Cele y sus amigas

Llegue tarde la clase, mis 4 “amigas” estaban juntas en un rincón mirándome- Al pasar al lado de ellas solo atine a agachar mi cabeza y decir un tibio hola recibiendo miradas de desaprobación y enojo, busque el único lugar libre y me ubique para tomar la primera clase del día.

Los primeros 80 minutos pasaron normales, salvo por algún comentario que las chicas hacían tirándome palos y empezaron a recriminarme en nuestro grupo de whatsapp donde quedo claro que en el recreo debería dar una respuesta a mi falla.

Sonó el timbre que indicaba el fin de la clase y el inicio del recreo, espere sentada en mi silla hasta que todos huyeron salido menos mis “amigas”. La voz de la reina ama me saco de mi trance

-¡Qué te piensas, estúpida! Tuvimos que cargar nuestros útiles, acomodar nuestros pupitres y después osas entrar y no saludar como es debido. ¿Qué tenes que decir a todo esto?-

-Perdón amas, se pincho la moto y llegamos tarde. Y no sabía que debía llamarlas amas en frente de toda la clase.

No me atreví a levantar la vista mientras me hablaban menos cuando respondía.

-Ahora te arrodillas, nos saludas como es debido y besas nuestros zapatos.

Obediente pose mis rodillas desnudas en el suelo frío del salón de clases, ya que la falda siempre la usaba 3 dedos arriba de lo permitido.

-Buenos días ama Micaela, acto seguido besar sus zapatos.

-Buenos días ama Sofía, también besar sus zapatos.

-Buenos días ama Andrea, volver a besar los zapatos.

-buenos días ama Noelia, y otra vez agacharme y besar los zapatos.

Ellas no paraban de reír y seguro grabar toda la humillación a la que me estaban sometiendo.

-Así esta mejor maldita perra, y espero que esto te enseñe a tratar mejor a tus superioras.- Andrea siempre estaba a la par de la reina ama Sofía.

-Aunque como tuvimos que caminar con nuestras carpetas nuestras suelas se ensuciaron de más.- comentó Noelia extendiendo su zapato derecho hacia mí

-Lame las suelas ahora, y no se te ocurra hacer mala cara.- Sofía siempre era la que llevaba la voz cantante.

Tímidamente saque mi lengua mientras con mis manos tomaba su pie extendido y empecé a lamer, sentía que una lija pasaba por mi lengua.

Ellas empezaban a organizar una pijamada para la noche aprovechando que era viernes y último día de clases de la semana. Noelia tendría su casa vacía, ya que sus padres estaban fuera por negocios y su hermano mayor iría a cenar con su novia.

-Andrea, convídame de ese alfajor que trajiste, el paquetito vende.-

Le pasa a Sofía el alfajor, lo abre y da un bocado. Lo mastica unos minutos y lo escupe al tiempo que exclama

-¡Qué asco, esto ni se puede comer! Dio a las otras chicas a probar y también hizo una seña que no alcance a ver ya que estaba terminando de lamer las suelas.

Las demás copiaron a Sofía, mordieron el alfajor, lo masticaron y lo escupieron en el mismo lugar, todas hicieron exclamación del gusto feo.

-Bueno Cele, vas a tener que comerte el alfajor, ya que a ...