1. ¡Qué noche de placer!


    Fecha: 02/05/2019, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Fantasito, Fuente: CuentoRelatos

    ... en mi culo. No fue en forma violenta pero si sin detenerse hasta que llegó hasta que sus pelos me frotaban la puerta, sus bolas se pegaban a mi periné. Mayor era mi gozo porque a mi lado, Silvina gemía y rogaba:
    
    - Qué hermosa pija tienes!! Cógeme fuerte!! Lléname la concha de leche!!! Préñame!! Rómpeme el ojete!! Teneme de puta tuya!
    
    Se imaginan, tener la tripa estirada por esa vergota y oír a tu mujer con es palabras? Estaba en el paraíso.
    
    Era tal mi calentura que eyaculé sin tocarme y sentí que con un ruido que no se si era un gruñido, un bufido o un alarido, Enrique me llenó el culo de leche.
    
    Se le fue achicando y me la sacó. Mamé esa esplendorosa verga, tenía sabores mezclado, a semen, a mis jugos y un pequeño gustito a... (a culo, me entienden?) que me enloqueció. Comenzamos a acariciarnos como en un dulce idilio, besé todo su cuerpo, sus muslos, su vientre, su pecho, sus transpiradas axilas. No sé cuál de los dos estaba más cliente. Enrique me pidió:
    
    - Métemela bien hondo.
    
    Abrí sus nalgas y le enterré mi verga en su hambriento culo.
    
    En realidad no tardé mucho en acabar dentro de su tripa.
    
    En eso se acerca Pablo: - Enrique, cógetela a Silvina, esté riquísima y es una puta calentona.
    
    Pablo me hizo abrir la boca y me metió su verga toda encastrada de su semen, de los jugos de mi mujer y qué se yo más. Estaba deliciosa.
    
    Después que Enrique llenó de semen a Silvina, nos vestimos y nos fuimos al coche, los dejamos acostados uno lado del otro y desnudos.
    
    Como intercambios teléfonos nos juntaremos en dos o tres semanas.
    
    Cuando llegamos a casa cogimos con Silvina, no hay otra cosa que me caliente más que cogerla con su concha llena de leche ajena
    
    El lunes le comenté Silvia que sentía un exquisito dolor sordo y excitante en el interior de mi vientre.
    
    Ella sólo sentía una molestia interna sin llegar a ser ese dolor.
    
    Llama por teléfono un médico que integra nuestro grupo de orgías, junto su mujer. Me explico que entre el recto y el colon hay una válvula que fue forzada y que en unos días se iría ese dolor. Rio y me dijo ahora no te salvas de nuestras vergas, jaja.
    
    Estoy esperando que llegue un nuevo encuentro par que me produzca el mismo dolorcito. 
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