El funcionario de la cárcel II - Relatos Eróticos

El funcionario de la cárcel II

- hola Tomás.....quería saber un poco más de unos reclusos de mi módulo.

- te ha pasado algo ya????

- no, nooooo.....para nada, solo como información. Esteban me precavio de ellos antes de irse.

- siiii.... dime celda o número de preso.

- el primero es el 5004, y el segundo el 3456.

- haberrrrrr......haberrrr.......bueno por aquí tenemos a Braulio Montés Vierga, 45 años de Badajoz, alias el pollas.....joderrrrrr....que Alias.....maltrato a su mujer.....paliza a su suegro y la nueva pareja de ella que dejó en coma durante varios meses, practicante de boxeoooo...... intimidación y robo a mano armada en una joyería y tráfico de drogas. Total 25 años de condena de los que ha cumplido 17 ya.

- buen currículum la verdad....

- cierto. Vamos a ver el otro.

- Carlos Pietro González, venezolano....38 tacos, detenido por tráfico de drogas al cruzar la frontera y pendiente de juicio por asesinato en primer grado al rajar el cuello a otro tipo en una rellerta.

- vayaaaa este tiene mejor currículum.

- pues ahí lo tienes, te saco copia????

- te lo agradecería.

- no es molestia.

Me iba a casa, había terminado ya mi turno, ahora sabía con quién estaba tratando en aquel módulo, parecían los cabecillas de allí y todo lo que allí acontecía siempre pasaba por la aprobación de estos dos tipos. Braulio era más veterano, mientras que Carlos aunque llevaba tan solo 5 años en prisión, ya se había hecho con parte del poder en aquel recinto, debía de ser listo y contundente para haberse ganado a los presos en tan poco tiempo. Ahora me sentía si cabe un poco más preocupado por el tal Carlos, este me había visto tocarme viendo cómo follaban sus compañeros en la celda y esa carta sabía que tarde o temprano la intentaría jugar.

Esa misma noche, cuando llegue al centro penitenciario, los colegas me advirtieron de que por la tarde había habido una trifulca entre los susodichos. Carlos y Braulio habían acabado a leches y por lo que me contaron el chico de melena rubia había sido supuestamente la causa, ese al que vi a Braulio follarselo.

No imaginaba la razón y el porqué de aquella pelea, tampoco es que me interesará mucho, pero mi intranquilidad iba en aumento ya que en medio de todo aquello yo había sido un espectador de excepción.

Había pasado unas horas, serían sobre las 12 de la noche, escuché un gran golpe en una de las puertas forjadas de hierro, una de las ventanillas se abrió y un fuerte grito surgió de ella......

- Brauliooooo......Brauliooooo......hijo de puta, te voy a matar.....

Despierta hijo de tu puta madre, desgraciado.....

Me levanté sobresaltado, cogí mi porra y fui directo hacia la celda...

- que quieres cabron, déjanos dormir desgraciado.....

- hijo de puta te has follado a mí putito.....eres un hijo de la mala puta.

- callate puto de mierda o las pagarás bien caroooooo....

- silenciooooo......no quiero oír ni un ruido masssssss.......( mi porra golpeó contra la puerta de hierro fuertemente ...