Mi esposa argentina 2 parte 8 - Relatos Eróticos

Mi esposa argentina 2 parte 8

... móvil.

Ella rápidamente levantó las rodillas y las llevó a su pecho, se abrazó a sus piernas, con los pies muy juntos.

_Que guapa eres cariño, nos has alegrado la noche_ dijo Alfonso

_ Guapísima_ dijo uno

_Buena que te cagas_ dijo otro.

Mi esposa entreabrió los labios para decir algo. Pero Alfonso se le adelantó.

_Vamos abre esas piernas ya_

_Muestra el coñito ricura_ creo que fue el marroquí quien lo dijo

_Todo fuera ya venga_ gritó ese tío que no conocía y que era más joven que los otros tres. Todos se rieron

_ ¿Pero qué coño pasa aquí? ¿Esta niña hace el favor de llamarnos y ya estáis gritando como unos guarros?_ dijo falsamente Alfonso

_No les hagas caso pequeña, tú has lo que te salga, venga, abre las piernas para mí, solo para mi_

Fernanda me miró con los ojos llorosos y entonces supe que ya estaba, que haría todo lo que Alfonso quisiera. Fue separando las piernas y siempre con las rodillas levantadas, mostró su coño palpitante bajo las bragas.

_Ostia puta_

_La madre que me parió_

_Dile que se toque un pezón Alfonso_

_Ya has oído putilla pellízcate un pezón_

_La manito en el coño_ dijo el desconocido

Fernanda lentamente, con la mirada perdida, casi como una autómata, se pellizcó un pezón con dos dedos de la mano derecha y colocó su mano izquierda sobre su coño por encima de las bragas.

La imagen era impactante, las piernas poderosas de mi esposa con las rodillas levantadas, los pies desnudos sobre la cama, se pellizcaba un pezón, estiraba el pecho y lo dejaba caer bajo su peso.

Su cara estaba completamente arrebatada, roja por la excitación con la fina naricilla levantada como buscando aire, pero lo que más me asombraba era su mirada como ausente, ya con su voluntad perdida y cachonda sin remedio.

_ Magréate lo dos tetones guarrilla_ dijo el marroquí

_Eso, no hagamos diferencia, y la mano dentro de las bragas que debes estar empapada mi niña_ dijo Alfonso

Fernanda fue de un pecho al otro pellizcándose los pezones y hundió la mano dentro de sus bragas y suspiró, un suspiro largo y profundo.

_Joder como está la pava_

_Estas mojadilla a que si mi niña ¿Te gustaría tener mi polla ahí dentro no es verdad zorrita?_ dijo Alfonso cada vez más salido como el resto.

_Si……_ dijo mi esposa

_Levanta esa camiseta que se te vean las tetas_

_Dale caña a ese chocho puta_ dijo el desconocido que era bastante violento, se le veía con su cara brutal.

Era como un chat de webcam sin ninguna moderación y gritado a voz en cuello.

Fernanda se levantaba ahora la camiseta y sobaba sus tetas a mano abierta, mientras la mano en el coño se movía frenéticamente masturbándose.

_Fuera esa camiseta de una vez, venga_

_Fuera todo_

_ No…. esperad cabrones las bragas todavía no, que se las deje_ dijo Alfonso

Fernanda se quitó la camiseta por sobre la cabeza levantando los brazos con lo que sus tetas se levantaron y cayeron pesadamente como dos bolas de carne.

_Guauuu ...