1. Encuentro


    Fecha: 22/04/2019, Categorías: Hetero Autor: lector, Fuente: TodoRelatos

    Habíamos quedado para comer. Toda la mañana había estado sintiendo esa desazón que no te deja estar tranquilo por un momento. Esos nervios que vienen de la incertidumbre de saber el ánimo en que se encontraría. No era la primera vez, ni mucho menos, pero nunca llegó a tener la seguridad de cada encuentro. Cuando la vio, sus ganas aumentaron y durante la comida no paró de observar sus labios, los movimientos al comer o beber, la manera en que se pasaba la lengua entre ellos durante la comida. Tenía un pecho generoso, y encontraba difícil no llevar la vista a ellos. El movimiento natural que tenían con su respirar lo alteraba en gran medida. Todo en ella le causaba gran excitación, las cosas naturales o sencillas que veía en ella.
    
    La comida le pareció eterna y no encontraba el momento de levantarse de la mesa. El viejo truco de compartir el postre para que la cosa no se alargara mucho ayudó un poco, pero el momento en que ambos rechazaron el café que amablemente les ofreció la camarera empezó a tranquilizarle un poco. La propuesta de tomarlo en su casa fue aceptada con naturalidad lo cual también ayudó a calmarle.
    
    La conversación era fluida en todo momento, y trató de no perder el hilo mientras ponía cucharaditas de café en la cafetera. Poco después un delicioso olor comenzó a emanar de la cafetera y enseguida estaban en el sofá con las tazas entre las manos.
    
    La distancia entre ellos era corta y su perfume le jugó otra mala pasada, recuperando parte del nerviosismo anterior. Acabado el café se acercó un poco más a ella y rozó sus labios con los suyos. Lo siguiente fue sentir la cálida humedad de su lengua con la que comenzó a jugar. Se abrazaron hasta anular la distancia entre ellos y él no pudo mantener sus manos quietas ni un momento más. Chupaba su lengua y mordía sus labios mientras sus manos recorrían la espalda y el costado, rozando en ocasiones sus pechos, que lo esperaban con ansia. No tardó en encontrar un hueco en su blusa por el que pasó su mano para acariciar el sujetador, sin poder impedir la atracción de su pezón. Estaba duro y podía jugar con él a placer. No paraban de besarse y las caricias eran cada vez más intensas, dejando de lado las sutilezas. Metió su mano por dentro del sujetador, por la parte superior y comenzó a pellizcar el pezón duro, que lo recibió con alegría. Consiguió sacar el pecho fuera sin esfuerzo y su respiración se aceleró.
    
    A partir de ahí solo quedaba ofrecer sus cuerpos. Ella disfrutaba del sexo y nunca mostró ningún recato. Estaba excitada y le deseaba así que más abrió la bragueta del pantalón y liberó su polla del calzoncillo. Se la metió en la boca con las mismas ganas que él tenía y empezó a mamarla con atención. Él acariciaba su cabello y metía la mano entre sus rizos, mientras que ella chupaba su polla gozando con su sabor. Estaba totalmente cachonda y no paraba de imaginarla dentro de su coño mojado y caliente.
    
    Él como pudo se fue liberando de la ropa y después de disfrutar un rato más ...
«12»