-
¿quién soy? 7
Fecha: 08/04/2019, Categorías: Infidelidad Autor: TONY2311, Fuente: TodoRelatos
... desesperado, acabaron juntos, despatarrados quedaron sobre el mantel…el perro los miraba expectante… Varias horas estuvieron abrazados, desnudos, acariciándose, contándose boludeces, la doctora tuvo la delicadeza de no agobiarlo con su amor, no sabía cómo podría reaccionar Don…el muchacho se encontraba como estupidizado ja ja, sus pensamientos iban para todos lados, se sentía muy feliz abrazado a la doctora, que sus pechos apretaran el de él, le daban un goce espectacular… Ya de tardecita recogieron todo y enfilaron para casa, el muchacho pensó en que tendría que empezar a contarle sobre lo de la pileta de la sociedad de fomento, pero no se atrevió… Esa noche después de cenar la doctora llevó a Don a su cama, se pasaron varias horas cogiendo, ya de madrugada se durmieron… El lunes en el hospital se entabló el siguiente diálogo… Doctora _Decime Gladys cuánto hace que tenés sexo con Don… Gladys _Desde el día que lo acompañé a las casas, ese día me rompió el culo, por eso no vine a trabajar, dije que estaba indispuesta, después rengueaba para disimular… luego le di una crema con la que pude aguantar… D. Sí vi el pote, ya queda muy poco ja ja… G. _Te hizo el culo, lo aguantaste, te dolió mucho… D. _Me dolió un poco, pero lo aguanté, la pomada es mágica, haceme acordar que lleve un pote para casa ja ja… Y estaban felices, nunca se plantearon lo que podía estar sintiendo Don… El muchacho estaba sobre el andamio, pintando en la altura, en la sociedad de fomento y no podía dejar de pensar lo que había vivido el día de ayer en el río con la doctora…le causaba una placer inmenso, sonreía, hasta se reía solo… Como algunos jueves estaba un poco frío para meterse al agua, según consideración de las cuatro bandidas, las señoritas se entretenían con Don, lo llevaban a las colchonetas, a las duchas, él aprovechaba y descargaba todo su instinto medio animal, últimamente le estaba pasando que le gustaba más estar con la doctora que con ninguna otra… Y parece que las chicas hicieron un pacto, el compartirlo, como en la casa de Carmencita y de Teresita no había estado decidieron que por ahí empezaría… Carmencita convenció a su papá, el intendente que necesitaba pintar su cuarto, que el muchacho del hospital lo hace muy bien y gratis…y así Don fue a parar a la casa del intendente, su esposa Juana, una morocha de muy buen ver, lindo cuerpo, trabajado por el gimnasio que tenía en su casa, completo, tanto caminadora, bicicleta fija, y una máquina impresionante que podrías sacar músculo hasta en los labios vaginales ja ja, la señora la usa muy seguido… Al primer día, mientras rasqueteaba las paredes Don sintió que lo abrazaban por atrás, era Carmencita que estaba mimosa la infiel, tiene novio… le tocó la pija, que se le puso dura al instante, le desabrochó el botón de la bermuda, le bajó el cierre, le apartó el calzoncillo y le sacó a la bestia…se la metió en la boca, no sin un poco de esfuerzo, era muy gruesa…en la cama ...