Mi adorable familia VIII - Relatos Eróticos

Mi adorable familia VIII

semana santa, de santas cogidas.

Día 1.

Como ya les habia comentando en el relato anterior mi relación con Freddy fue bastante corta, al igual que nuestros encuentros sexuales, porque lamentablemente el me engaño creo que se podría decir que era algo inevitable al andar con un chico más grande que yo, tal vez se aburrió o no lo sé se encontró con alguien con la misma madures que el.

Aún que si estuve algunas cuántos días un poco triste por lo sucedido, ya que si fue una decepción bastante grande para mí, por mi menta pasaba el que tal vez no fui lo suficientemente mujer para él, para evitar verlo deje de ir a ese gimnasio cambiándome a otro donde igual conocí muchos chicos pero no quise tener nada con ellos, solo una pequeña cogidita con el dueño pero eso se los contare el siguiente.

Al cambiarme de gym también cambie en el tema del carácter, me volví un poco más fría y creo que como todos sabemos las madres siempre tienen ese sexto sentido para saber que nos pasa algo, no me lo dijo enseguida pero si unas semanas después que ya estaba un poco más estable y recuperada emocionalmente, pero si más madura y con más frialdad lo repito, creo que también lo noto y vio que era el mejor momento para hablar conmigo.

+ Hija no sé que es lo que te sucedió, ni el porque de tu cambio de actitud ni el porque el cambio de gimnasio, pero quiero decirte que cuentas conmigo.

Yo un poco sacada de onda.

- No fue nada mamá, solamente me aburrió el estar en ese gym y quería algo nuevo, mi actitud creo es la misma y se tal vez he cambiado es por tantas tareas, pero aún así gracias por tus palabras.

Estuvimos charlando bastante sobre este tema donde ella me habló de los noviazgos y de la sexualidad, suponiendo ella que no había perdido mi virginidad bueno creo, pero lo tome muy natural para que no se diera cuenta de que ya tenía un camino algo recorrido en ese tema, pasaron algunos días y me informo que no podríamos salir todos juntos de vacaciones de semana santa, pero que podría ir a visitar a la familia de mi tío Eugenio hermano de papá, con su familia casi no convivimos pero justo con ellos si tengo buena relación y tenía ya algo de tiempo de no verlos así que acepte además de que viven cerca de la playa y su casa está a súper padre con alberca y todo, unas vacaciones en un lugar así me vendría súper bien para despejar la mente.

Me iría a casa de mi tío el día miércoles por la mañana y regresaría domingo en la noche, mi papá iría a dejarme en su coche así que desde lunes me puse a acomodar mis cosas poco a poco para no olvidar nada y que no me agarrará la tarde.

Por fin llegó el día, me despedí de mamá y me fui con papá, durante el camino estuvimos platicando de algunas tonterías, escuchando música y cantando, es un camino algo largo de unas 5 horas así que por momentos me dormía, cuando llegamos inmediatamente nos recibió la familia de mi tío, que está a conformada por su esposa, mi primo Pablo (el protagonista de esta historia) y su ...