El viaje del pequeño migrante. 5 - Relatos Eróticos

El viaje del pequeño migrante. 5

Como todos mis relatos, nada es verdad, nada es mentira, todo depende con el cristal con que se mira, por lo que no es cien por ciento real, aún así espero les sea de su agrado.

Desperté antes del amanecer me puse de pie y salí desnudo a la terraza del curto para hacer unas posiciones de yoga viendo salir el sol pensando que tuve suerte al encontrarme con el señor que me iba a llevar con mi familia y además la estaba pasando bien con él.

Estuve en la terraza hasta que el salió y acaricio las nalgas.

—- buenos días, entra a ponerte ropa casi nos vamos —

Me puse de pie dándole un beso en la boca.

—- buenos días —

Entre al cuarto orine, me lave las manos y cara, me puse lo que deje fuera de la mochila, la panti amarilla con lunares de colores, la playera y short del colegio de Diego y me cepille el cabello mientras el termino de guardar sus cosas y subía el empleado del hotel por nuestras cosas, pago la cuenta del hotel y salimos a las seis y media.

— vamos a Campeche porque voy a ver a un cliente en ciudad del Carmen y ahí desayunamos —

Me puse a ver mi celular para aprender a usarlo, con el movimiento del auto me acosté en el asiento quedándome dormido un buen rato, al despertar me senté estirándome.

— ya vamos a llegar —

Me dijo que en media hora, pasábamos un pueblo con muchos topes para autos y más adelante vi por primera vez el mar.

— nunca había visto el mar, es muy bonito —-

El señalo un puente.

—- si es el mar, del otro lado del puente esta una laguna —

Pasamos el puente y llegamos a ciudad del Carmen.

— te voy a llevar a desayunar a un restaurar que está en la playa para que veas el mar —

Entramos a la ciudad y fue a donde estaba la playa norte parando en un restaurante, pedimos a una mesera lo que queríamos.

— Víctor, mientras traen las cosas quítate los tenis y calcetas y ve a caminar por la playa para que veas el mar —

Salí caminando con un poco de miedo al mirar las olas aunque no eran grandes, al ser temprano no había mucha gente, me atreví a llegar a donde subía el agua para mojarme los pies, estaba muy distraído hasta que una nena llego.

—- dice tu papá que vayas a desayunar —

Le sonreí dándole las gracias y fui a la mesa a desayunar, el señor me dijo que si me había gustado el mar de ciudad del Carmen me iba a gustar mucho más el mar de Cancún, al terminar de desayunar el me tomo varias fotos con mi teléfono unas solo y otras los dos juntos.

Después del desayuno el fue a ver a su cliente, no tardo mucho y salimos a carretera, fui leyendo el libro que me compro de los mayas, me quedaba dormido despertaba y practicaba con el teléfono hasta que llegamos a Champotón donde paro a ver a otro cliente, al salir de esa ciudad dijo que en unas dos horas llegaríamos a Campeche.

Al llegar al hotel ya estaba oscureciendo, entramos y fue a recepción a registrarse pidiendo un cuarto con vista al mar, el señor que lo atendía lo conocía.

—- ahora viene acompañado —-

Me movió el ...