Mi amigo Héctor, hetero casado 4 (Juan) - Relatos Eróticos

Mi amigo Héctor, hetero casado 4 (Juan)

Por lo general la panadería era el punto de encuentro, ellos algunas veces van de paseo en motos y otras veces en bicicleta, hacen maratones en bicicletas y competencias, pero siempre empiecen y terminan en la panadería.

Un día estoy llegando a mi casa y Juan va llegando en bicicleta a la panadería todo sucio de barro, se había caído por culpa de la lluvia, estuvimos conversando ya que había llegado y la panadería estaba cerrada, él estaba con la intención de cambiarse de ropa ahí, ya que había dejado su carro ahí cerca, pero al estar cerrada lo invité a cambiarse en mi casa (jugada fríamente calculada) incluso le dije que podía darse un baño y yo aprovechaba de lavar su ropa.

Juan es un tipo de 50 años, 1.70m, moreno claro, canoso, tanto en el cabello como en la barba, no es gordo, pero tiene carne de donde agarrar, debe estar al rededor de los 90kg, es el único de los 4 amigos que está tatuado, tiene tatuado un pectoral, el hombro derecho, el antebrazo izquierdo y pierna derecha, tiene abundante vello en el cuerpo, pero siempre lo lleva bien recortado. Esto le da un aire aún más sexy.

Juan se quitó la ropa en el medio de la sala y me la entregó, paseando su desnudez sin vergüenza alguna (ambos sabíamos lo que iba a pasar) fue hasta mi cuarto para bañarse y yo fui atrás de él para entregarle una toalla. Y lo dejé ahí, fui a poner a lavar su ropa y atendí una llamada de trabajo mientras hacía tiempo para el terminar de ducharse.

A los minutos sale nuevamente desnudo y con la verga dura como una piedra y me dice “ahora es mi turno, chupame la verga a ver si es verdad lo que dicen mis amigos”

Como hipnotizado me arrodille en el medio de la sala y comencé a comerme esa verga como si no hubiese mañana, una verga normal, unos 17cm, con un grosor aceptable, con muchas venas marcada y un grande como un champiñón.

Estuve chupando esa verga varios minutos, lubricaba mucho y yo me deleitaba con esos jugos.

Paré y me lo lleve hasta mi cama, se acostó con las piernas abiertas y me pidió hacer un 69, parecía hambriento por la manera en que me comía el culo,y yo me comía esa verga dura.

Se levanto y me puso en 4 me paso la lengua por el culo y sin más me enterró la verga, yo temblaba del placer, es así como me gusta que me cojan, estuvo bombeando y me daba nalgadas y me tiraba del cabello mientras me cogia, no aguanto mas de 10 minutos y me dejo el culo lleno de leche y bien satisfecho.

Estuvimos en cama un tiempo hablando, y tocándonos, puse su ropa a secar en la secadora, y fui al cuarto y le dije, aún falta media hora para que esté seca la ropa y me fui directo a su verga dormida y comencé a chupar aún llena de babas y enseguida se puso dura, me cogio por la boca unos minutos, pero yo quería mas verga en el culo y paré la mamada y me senté encima de esa verga jugosa con mi culo aún lubricado por la leche, y estuve cavalgando otros 10 minutos, Juan no es de aguantar mucho, pero es cumplidor.

Estuve sobre él, seguía un poco duro ...